Aunque firmó muchos libros ilustrados, la faceta de ensayista no fue habitual en Picasso. Roberto Otero/Vegap
50 aniversario muerte del pintor

El artículo de Picasso que escapó a la censura franquista

Localizan un texto atribuido al malagueño y publicado en los años 40 en 'Cartel de las Artes', una revista que se atrevió a reivindicar al pintor en la dictadura

Domingo, 23 de abril 2023, 23:14

En aquel 1945, Pablo Picasso era tan mundialmente conocido en todo el planeta como olímpicamente vetado en España. Enemigo del régimen franquista por su apoyo ... a la República y por la denuncia de la Guerra Civil en su cuadro más emblemático, 'Guernica', su nombre se ignoraba y vetaba durante la larga y fría posguerra, sobre todo en los años inmediatos a la contienda. Por ello, el poeta Francisco García Castro tuvo que leer varias veces el apellido del pintor cuando se topó con un artículo en la revista 'Cartel de las Artes', 'El arte moderno', que firmaba el artista y en el que defendía su propio concepto del arte. Un escrito doblemente singular ya que, por un lado, Picasso no era dado a firmar este tipo de textos y, por otro, su presencia no era del gusto de la férrea censura de la dictadura.

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«Me paso horas repasando publicaciones antiguas de la Biblioteca Nacional porque tengo pasión por las letras y el arte y, aunque mi intención no era desenterrar ni descubrir nada, la aparición de este artículo ha sido una alegría porque es muy desconocido y pertenece a además a una época en la Picasso estaba prohibido y en el ostracismo en España», explica García Castro, que envió una copia pdf de la publicación a la Casa Natal de la Plaza de la Merced, donde le confirmaron que se trataba de una rara avis.

Número 6 de 'Cartel de las Artes' que publicaba el artículo de Picasso 'El arte moderno'. Biblioteca Nacional

Una de las claves del artículo 'El arte moderno' es que, como especifica 'Cartel de las Artes', fue publicado por primera vez en 1929, aunque la revista que lo rescató a mediados de los 40 no cita la fuente original. Por tanto, Picasso contaba en el momento de su primera edición con 47 años, acababa de introducir el Minotauro en su obra, se sentía atraído por la escultura y su vida se debatía entre su matrimonio con Olga Khokhlova y su enamoramiento de la joven Marie-Thérèse Walter. Un momento clave en el ecuador de su longeva vida en el que sintió el impulso de hablar de su obra, dejar claro que no era partidario -ni integrante- de escuelas ni tendencias y que, básicamente, su ideario era la libertad artística que es lo que definía el arte contemporáneo del siglo XX.

El artículo completo de Picasso

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«Que se pretenda clasificar mis obras en una u otra escuela, me hace indignar, porque yo no soy ni impresionista ni expresionista. No quiero ser más que un artista. (...) Pertenezco al arte moderno, es decir, que soy libre e independiente, ya que busco dar forma y vida a los sentimientos y a las concepciones de mi época», afirmaba de forma vehemente el malagueño en el texto, que incluso separaba la obra del pensamiento o la ideología del creador. De lo que no renegaba Picasso era de su procedencia sureña. «En lo que a mi se refiere, soy de origen meridional, y de eso resulta un sentimiento que creo se manifiesta en mis pinturas», concedía el artista que se quejaba «del ritmo vertiginoso de la vida moderna» y de cómo afectaba al arte con un efecto de simplificación. Curioso argumento que no ha perdido actualidad en esta era de Internet. «Es un texto muy personal y además no hay otro igual en la Biblioteca Nacional, donde solo he encontrado la firma de Picasso en manifiestos durante la guerra civil o en algún periódico de Londres», explica García Castro, autor de los poemarios 'Balada del viejo bunk y otros poemas' (Colección Monosabio) y 'El engorroso plumaje del colibrí espátula' (Ed. Imperdonables), que también destaca la reivindicación que hizo 'Cartel de las Artes' de la figura y la obra picassiana.

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Mirlo blanco

Considerada un mirlo blanco en el escaso panorama de las publicaciones culturales españolas de la época, la revista tuvo un «talante progresista y aperturista», lo que le provocó «no pocas ocasiones críticas y medidas coercitivas procedentes de la siempre presente censura», como explica la experta Ana Isabel Álvarez Casado en 'Repertorio bibliográfico artístico en prensa periódica española (1936-1948)'. Impulsado por el escritor, poeta y crítico de arte Enrique Azcoaga, 'Cartel de las Artes' hizo de Picasso una de sus temas predilectos en aquella época de pensamiento único, publicando no solo este artículo con su firma sino otros sobre su obra e influencia. Todo un desafío para la oficialidad, por lo que ya fuera por su disidencia o por los problemas económicos para financiarse la revista solo tuvo ocho meses de vida y diez números que, no obstante, dejaron huella.

«Pertenezco al arte moderno, es decir, que soy libre e independiente, ya que busco dar forma y vida a los sentimientos y a las concepciones de mi época», se declara Pablo Picasso en el artículo de 1929

Tras la comunicación de García Castro sobre la existencia de este artículo, la Casa Natal no solo ha incorporado este texto a su catálogo de publicaciones, sino que el documentalista Salvador Bonet y el poeta y biógrafo picassiano Rafael Inglada han realizado una investigación que ha arrojado datos muy reveladores. Así, 'El arte moderno' fue efectivamente publicado originalmente en 1929, concretamente en la revista catalana 'D'Aci i d'allá', con la firma «Pau Picasso». No obstante, la autoría fue puesta en cuestión por el crítico de arte Sebastián Gasch al año siguiente de su publicación, aunque posteriormente fue dado por bueno en repetidas ocasiones al ser publicado de nuevo en Francia y, hasta tres veces más, en España. La última vez fue en 1981, cuando fue incluido en el catálogo de la exposición 'Picasso 1881-1973', editado por el Ministerio de Cultura.

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En lo que coincide Bonet es en las escasas referencias que existen de Picasso con su propia voz, cuyas opiniones se han extraído habitualmente de dos fuentes «canónicas» y reconocidas: sus entrevistas con Marius de Zayas (1923) y Christian Zervos (1935). A ellos se une el artículo 'El arte moderno' que, sin duda, se presta a una apasionante investigación comparada sobre su autoría. Lo que no cambia es que este jugoso artículo con el nombre y el apellido de Picasso lograra burlar la censura en un momento el que el artista era persona 'non grata' en España.

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