El humor sobre la vida después de la jubilación gana premios

Cada vez que se le pregunta a Santamaría por el galardón, se quita los méritos del mismo. Resume su experiencia en que, a pesar de haberlo presentado él, no podría haber salido adelante sin contar con la ayuda de sus compañeros de clase: Candida Rodríguez, Esther García, Rafael Salas y Francisco Fernández. Tampoco sin la ayuda de los dos docentes que impartían el curso en el aula de mayores de la Universidad de Málaga, Paloma López y Carlos del Castillo. De hecho, es tanto el agradecimiento del galardonado que recae continuamente en recordar que se matriculó en el mismo curso hasta tres veces seguidas, pero que ya ha buscado otro porque «después de tres años, tienes que darle la posibilidad a otras personas que quieran».

Un podcast con el que identificarse

La historia de 'Cita Previa' narra de forma humorística los nervios de la jubilación y cómo una persona mayor se enfrenta a la barrera que puede suponer la tecnología para pedir cita en la Seguridad Social. En el audio se pueden identificar varios personajes, de los que destacaría a Paquita y a Pedro, un matrimonio. Paquita, de forma insistente, le repite a Pedro que consiga la cita, y le llega a decir que es «torpe» para su edad en comparación con amigos de la pareja. Santamaría destaca esto, ya que, a pesar de las peleas que puedan surgir a lo largo de la narrativa, Paquita acaba convirtiendo a su marido Pedro en el «más listo» cuando logra su cometido. «Es un matrimonio en el que están esas peguillas, cuando ya llevamos mucho tiempo casados», comenta el autor con una sonrisa.

Él se dio cuenta de que lo que más gustó en el jurado fueron las notas humorísticas porque «muchas veces había tragedia o historia». Ahí fue cuando él verdaderamente pensó que podrían ganar, pero el éxito se lo concede a la forma en que la gente se identificó con lo que escuchaban.

El final de la historia, cuando a Paquita y a Pedro les suena la alarma para conseguir reservar una hora, termina con ambos contentos prometiéndose unos churros después de dormir otro rato más. «Es que los andaluces tenéis gracia para decir las cosas», relata Santamaría como una de las reacciones que más se repitieron en el Caixa Forum de Sevilla. El premio no solo representa un logro personal, sino que también ha traído alegría a sus hijos y amigos. «Algunos se sorprendieron, pensaban '¿pero tú escribes?'», bromea.

La experiencia, asegura, le ha mostrado que «siempre se puede aprender algo nuevo», un mensaje alentador para cualquier persona que quiera lanzarse a descubrir facetas en los cursos para mayores de 55. «Al estar jubilado, los cursos te dan muchas posibilidades. A mí siempre me han gustado el teatro, la fotografía, los medios audiovisuales…», narra quien, además, dedicó su vida a la docencia. Santamaría admite que los alumnos le mantuvieron jóven, y que una vez se deja de trabajar, faltan cosas. «Hay que buscar cosas que gusten, que te entretengan, puede ser el radioteatro o puede ser otra actividad la que te mantenga con inquietudes, con ganas de hacer cosas», palabras que dedica a todas esas personas mayores que, como él mismo reconoce, pueden ser algo tímidos.

Entre sus proyectos personales contempla las tareas que ya les están asignando en el curso en el que está matriculado, que aborda la tarea de creación de un podcast. Sin embargo, a más largo plazo, a Santamaría le gustaría abordar el centenario de una orden religiosa: las Trinitarias. El tema le apasiona, y es por ello que habrá que esperar a que toda su idea se materialice en un proyecto que, ojalá, vuelva a permitir que el mundo escuche.