
Alberto Gómez
Viernes, 5 de agosto 2016, 00:33
El baile de sueldos públicos que marcó los primeros meses de legislatura en Benalmádena llega hasta la oposición. Un documento oficial revela que el Partido Popular ha registrado como portavoz a la concejala Yolanda Peña pese a que este cargo será desempeñado por Víctor González. Esta inconexión tendría como objetivo mantener el único sueldo por dedicación exclusiva que los populares tienen en el Ayuntamiento, ya que González es diputado provincial y no puede cobrar dos salarios públicos por la ley de incompatibilidades. Ante esta situación, el PP inscribió a Yolanda Peña como portavoz pese a que la edil no ejercerá como tal.
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La bancada popular al completo firmó un documento remitido al Consistorio en el que comunicaban la designación de Peña como nueva portavoz. Algunos días después, sin embargo, la exalcaldesa y presidenta del PP a nivel local, Paloma García Gálvez, presentó a González como nuevo portavoz ante los medios de comunicación durante una rueda de prensa en la que Peña ni siquiera compareció. Fuentes consultadas sostienen que la intención de los populares es rotar el puesto oficialmente, aunque en la práctica el portavoz será González, para que varios concejales sin cargos públicos remunerados reciban el sueldo correspondiente a la dedicación exclusiva.
Este periódico se puso en contacto con García Gálvez, que afirma que el diputado provincial de Cultura y Educación será «portavoz político y administrativo» y que Peña ocupará el cargo de «portavoz sustituta», aunque lo cierto es que en el documento oficial presentado por el grupo municipal popular, al que este periódico ha tenido acceso, Peña figura como portavoz y González lo hace como adjunto. En cuanto a la posible rotación del puesto, la exalcaldesa asegura que «habrá que ver cómo se desarrollan los acontecimientos».
El PP cuenta con nueve representantes en el Ayuntamiento de Benalmádena. El sueldo correspondiente a su portavocía asciende a 28.722 euros brutos al año. El resto de ediles cobran en torno a mil euros mensuales por ir a pleno. Algunos de ellos ostentan cargos remunerados en otras administraciones, como García Gálvez en la Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol Occidental o Víctor González en la Diputación.
El organigrama trazado en junio del año pasado por el alcalde, el socialista Víctor Navas, discriminaba a los populares, con una sola dedicación exclusiva y sin dedicaciones parciales pese a ser la formación más votada, en beneficio de los concejales de Ciudadanos y de Costa del Sol Sí Puede, también en la oposición pero con salarios idénticos a los del Gobierno local, de unos 44.500 euros brutos al año.
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Meses después de la investidura, tanto los ediles de la formación naranja, reconvertidos en no adscritos tras ser expedientados por un pacto encubierto con los socialistas, como los representantes de Podemos entraron a formar parte de la coalición hasta entonces compuesta por el PSOE, IU y Alternativa por Benalmádena. Los populares acusaron entonces a Navas de «comprar voluntades con sueldos públicos».
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