Piden 15 años de cárcel para un joven acusado de degollar a su hermana tras una discusión

El suceso se produjo el 3 de noviembre del año pasado. El joven, de nacionalidad ecuatoriana, vivía solo en un piso alquilado en el Paseo Marítimo de Los Boliches, debido a que tenía una orden de alejamiento por maltratar a su madre. Sin embargo, su hermana, de 25 años, seguía manteniendo relación con él. De hecho, iba a visitarle casi a diario para comprobar que estaba bien y para hacerle algunos recados.

El día del crimen, Érika visitó como de costumbre a su hermano Christian J. entre las 7 y las 8 de la mañana, cuando «por motivos que se desconocen», explica el fiscal en su escrito de acusación provisional, se originó una discusión entre ambos. Él esgrimió entonces un cuchillo y se produjo un forcejeo. La víctima logró que su hermano soltase el arma, pero éste «con ánimo de acabar con su vida», le agarró con fuerza por el cuello, dejándola casi inconsciente. Entonces cogió otro cuchillo y la degolló.

La herida infligida a su hermana le provocó la sección incompleta de la arteria carótida, lo que le ocasionó la muerte casi de forma inmediata por shock hipovolémico.

El novio de la víctima fue quien dio la voz de alarma. Extrañado porque Érika estaba tardando demasiado, decidió llamar a su cuñado para saber si se encontraba con él. «Sí, está aquí, pero está mal», le contestó el acusado.

Minutos después, la Policía Nacional encontró el cadáver de la chica en el piso. Había sido degollada presuntamente por su hermano, que según fuentes cercanas al caso habría reconocido el crimen a los agentes que lo detuvieron. Según algunos testigos, Érika y él solían discutir con frecuencia.

Los policías encontraron el cuerpo de la chica en un dormitorio. Aunque avisaron al 061 que envió una uvi móvil, los esfuerzos de los sanitarios fueron en vano. Ya había fallecido. Apenas había sangre en el piso, lo que sugería que el presunto autor había limpiado el escenario del crimen. Todo apunta a que la agresión se produjo en el cuarto de baño y que el joven trasladó el cuerpo de su hermana a la habitación.

No estaba enfermo

Aunque algunos vecinos aseguraron que el joven tenía problemas mentales, al parecer no tiene diagnosticada enfermedad psiquiátrica alguna. De hecho, la acusación pública no incluye, en su escrito provisional, ninguna atenuante o eximente por enfermedad mental.

Tras ser detenido, el joven fue conducido ante el juez de guardia, que ordenó su ingreso en prisión por un presunto delito de homicidio.

Además de los 15 años de cárcel, el fiscal solicita el pago de una indemnización 75.000 euros, como responsabilidad civil, al padre de la fallecida. Su madre ha renunciado expresamente a cualquier cantidad que pudiera corresponderle.

El juicio con jurado popular que juzgará estos hechos ha sido fijado para el 7 de marzo de 2016 en la Audiencia Provincial de Málaga.