Sancionan con 12.500 euros y precintan la mayor discoteca de Nerja por exceso de ruido
El Ayuntamiento insta a los propietarios a subsanar varias deficiencias en los sistemas de climatización como requisito previo para reabrir el establecimiento
Eugenio Cabezas
Miércoles, 11 de junio 2014, 01:10
El Ayuntamiento de Nerja no está dispuesto a que la zona de la movida nocturna de la plaza Tutti-Frutti y los alrededores se conviertan ... en un nuevo caso Ipanema, como el que condenó en 2008 al Consistorio de Vélez-Málaga al pago de una indemnización que supera los cinco millones de euros, por no atajar los problemas de ruidos que soportaron durante más de una década, entre los años noventa y comienzos de los dos mil, los vecinos del entorno de El Copo, en Torre del Mar. Por este motivo, desde que se conoció aquella sentencia que aún colea, pues los residentes todavía no han cobrado todas las indemnizaciones, el Consistorio de Nerja, siguiendo el dicho de cuando las barbas de tu vecino veas cortar, pon las tuyas a remojar, inició una campaña exhaustiva para controlar el exceso de ruido de los más de veinte establecimientos, entre bares de copas, terrazas y discotecas, que hay en la zona de El Chaparil.
Así, tras decretar media docena de cierres temporales de otros tantos establecimientos en este entorno en los últimos cinco años, por excesos de ruidos, desde el pasado 26 de abril está precintada la mayor discoteca del municipio, situada en la calle Antonio Millón. El Ayuntamiento de Nerja detectó, tras una medición realizada por técnicos de la Diputación, a raíz de diversas denuncias vecinales, que los niveles de ruido superaban en más de seis decibelios el máximo permitido por el decreto 6/2012, por lo que el Consistorio nerjeño ordenó el precinto inmediato y cautelar de la discoteca y ha abierto un expediente sancionador, por un importe mínimo de 12.500 euros.
Según informó ayer a SUR un portavoz de la empresa propietaria del establecimiento nocturno, Manuel Martín, los problemas de ruido se han producido a raíz de renovar los sistemas de climatización de la discoteca, también a instancias del Ayuntamiento, tras una inspección técnica previa. «Volvieron a venir para realizar mediciones de ruido y dijeron que superábamos en once decibelios el máximo permitido, hasta que no volvamos a cambiar los aparatos y hacer unas obras, nos han dicho que no podemos reabrir», aseguró.
Denuncias vecinales
Este empresario se quejó de que la temporada turística «está ya aquí y seguimos sin poder abrir». En todo caso, confió en que el asunto pueda quedar resuelto en esta semana, para poder reabrir de cara al fin de semana. «Nerja es un pueblo turístico, que en verano triplica la población, y la discoteca Jimmy lleva más de 30 años ofreciendo un servicio a los vecinos y visitantes», argumentó el portavoz del establecimiento, situado en un sótano de la calle Antonio Millón.
Por su parte, la concejala de Comercio, Nieves Atencia (PP), confirmó a este periódico que la inspección de los técnicos de la Diputación se llevó a cabo tras recibir varias quejas vecinales por el ruido de la discoteca. Dijo que están a la espera de que los dueños del local realicen las actuaciones necesarias para que los niveles de emisión de ruidos cumplan con las normativas. «Lo que incumplen es la sumatoria de la música más el sistema de climatización», manifestó la edil, quien recordó que la responsabilidad del Consistorio es velar por la tranquilidad y el descanso de los vecinos, compatibilizándolo con los negocios de ocio nocturno en la zona.
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