
Juanma Moreno no sólo lleva grabada en la memoria su más importante victoria política. Ahora también la lleva grabada en la piel. Para siempre. El presidente se ha tatuado en su muñeca izquierda el número 58, la cifra de diputados que consiguió el pasado 19 de junio, precedido de la letra A, por Andalucía.
Publicidad
La historia se remonta a a campaña electoral, cuando el entonces candidato a la reelección se cruzó por la calle en la localidad almeriense de Roquetas de Mar con Javier Pascual, un tatuador que le vaticinó que iba a conseguir la mayoría absoluta. No se sabe si porque no creía posible conseguir semejante resultado o porque creyó que de hacerlo merecería la pena, el presidente le respondió que si se cumplía el pronóstico, acudiría a que le tatuara el resultado electoral. «En un sitio discreto», matizó entre risas.
Dicho y hecho, el pasado lunes 17 de octubre Moreno cumplió la promesa y aprovechando una visita a la provincia de Jaén, se desplazó hasta Linares, donde se encuentra el estudio Barbiere 27, donde trabaja Javier Pascual. «Cumplo mi promesa», dijo nada más llegar.
La leyenda elegida fue el número 58 precedido por la letra A mayúscula. Seguramente a Moreno no se le ha olvidado el resultado del 19 de junio, pero por si acaso a partir de ahora la podrá recordar cada vez que mire la hora.
El presidente no ha garantizado que éste vaya a ser su último tatuaje. «Se empieza por uno chiquito», advirtió.
Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.