Antonio Maíllo vuelve a la política tras serle extirpado un cáncer de estómago

Antonio Maíllo, que apareció optimista y un poco más delgado, habló claro y con emoción en su entrevista con Esperanza Torres, Carlos María Ruiz, Manuel Castillo (director de SUR), Inmaculada Trenado y Diego Suárez y admitió que "al principio cuesta decirle a la gente que tienes cáncer, pero normalizarlo ayuda a afrontarlo".

Nada más iniciarse la campaña de las elecciones generales del 20D, Maíllo sufrió una hemorragia digestiva y un desvanecimiento cuando se encontraba en un acto público, en Aracena, donde reside. Fue trasladado al centro de salud y a un hospital, para ser operado con éxito y afronta ahora el retorno a la normalidad aunque gradual. Esta tarde preside una reunión interna, pero ha comunicado al presidente del Parlamento, Juan Pablo Durán, que su reincorporación será gradual y dependerá de escuchar su cuerpo. Su papel de portavoz parlamentario estaban siendo desempeñado por Elena Cortés, mientras Toni Valero le sustituía como coordinador.

Su prioridad es cuidarse, dijo, pero regresa lleno de sensaciones positivas, recibidas del cariño de amigos y compañeros, también de rivales políticos. Destacó cómo María Jesús Montero, consejera de Hacienda, ex de Salud y médico de profesión, ha estado ahí, a pesar de que veníamos de una gran bronca.

El coordinador general de IU ensalzó el valor de la sanidad pública andaluza, profesionales en los que deposita su "máxima confianza" pues es un personal, ha subrayado, que "te atiende no por los recursos que tengas, sino por tus necesidades para ser curado" y éste "es un valor formidable que debe ser más cuidado".

"Los parámetros vitales me han cambiado radicalmente", admitió. Convencido de que una actitud positiva cura, reivindicó la ternura en la política y dijo que la vida hay que vivirla cada día desde el optimismo, "sabiendo que la vida y cada día es irrepetible". "La ternura -dijo- es clave para tener una visión menos descarnada y dura de la política, me gustaría que se introdujeran elementos sentimentales"

Maíllo, profesor de instituto, doctor en Clásicas, dijo también que durante la convalecencia ha desconectado de la política y se ha dedicado a leer, a Pamuk, Almudena Grandes, entre otros, y dijo que pese a haber crecido en un ambiente religioso no había sentido inclinación en este terreno, pese a plantearse la incertidumbre del futuro, sin la reivindicación del humanismo, de la condición humana, la energía y la espiritualidad que todos llevamos dentro.

Destacó también que en todo su proceso ha sido de suma importancia "desatascar las palabras" para ser capaz de decirle a la gente que padeces cáncer, de normalizarlo, porque así "también se ayuda". "Resolviendo el problema del lenguaje resuelves la normalización de un hecho que tiene que afrontarse con el objetivo de la cura".