El juez envía a prisión al hombre acusado de matar al dueño de un bar en Torremolinos
Se le imputan presuntos delitos de homicidio y tenencia ilícita de armas tras hallar en su casa un revólver, una ballesta y abundante munición
J. CANO
Domingo, 13 de junio 2010, 03:50
El Juzgado de Instrucción número 3 de Torremolinos ordenó ayer el ingreso en prisión para el hombre acusado de matar el pasado jueves al ... dueño de una cafetería en el transcurso de una discusión.
Tras pasar a disposición judicial, el titular del juzgado ha decretado prisión para A. T. R., de 57 años y nacionalidad española, por los presuntos delitos de homicidio y tenencia ilícita de armas, según informaron a Efe fuentes judiciales.
Tras su detención, la policía encontró en su casa un revólver del calibre 38 -cargado y con una vaina percutida- que fue con el que supuestamente disparó a la víctima. También hallaron dos pistolas de fogueo, una ballesta, armas blancas y abundante munición, según las fuentes consultadas por este periódico.
Los hechos ocurrieron poco antes de la una de la tarde del jueves, cuando un hombre de 55 años falleció tras recibir un disparo en una cafetería de Torremolinos, en la calle Salvador Allende, ubicada en la barriada de La Carihuela.
Todo comenzó cuando la víctima recriminó al detenido porque, al parecer, estaba molestando a una chica que tomaba un café en el establecimiento. Según testigos presenciales, el camarero le llamó la atención y le pidió que respetara a sus clientes. El hombre pagó su consumición y se marchó sin mediar palabra.
La investigación apunta a que el sospechoso se marchó a su casa, que está situada en las inmediaciones, cogió un revólver y regresó al establecimiento. Testigos indicaron a la policía que irrumpió en el local, se dirigió a la víctima y gritó: «Es la última vez que me llamas la atención en público». Luego, supuestamente descerrajó un disparo a bocajarro al dueño del bar, que estaba detrás de la barra. El hombre cayó de espalda sobre una camarera, que no pudo sujetarlo.
Emprendió la huida
Según los testimonios recabados por SUR en el lugar de los hechos, el sospechoso abandonó el local diciendo «aquí no ha pasado nada». Luego salió corriendo calle arriba, en dirección a su domicilio. Un par de horas después, tras obtener una orden de registro judicial, agentes del Grupo de Operaciones Especiales (Goes) irrumpieron en su casa, pero el hombre ya no estaba en ella.
Esa misma tarde, los investigadores del Grupo de Homicidios de la comisaría de Torremolinos-Benalmádena localizaron y detuvieron al presunto autor del crimen en otra vivienda de su propiedad en la localidad de Pozoblanco, en Córdoba. En esa casa fue donde los policías hallaron armas y munición.
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