El ahorro energético se extenderá a todo el alumbrado público de Málaga

Algo tan sencillo como regular la intensidad de las farolas durante la madrugada, además de retrasar el encendido diez minutos y adelantar su apagado otros tantos, están permitiendo al Ayuntamiento de Málaga ahorrarse 2,5 millones de euros anuales en el alumbrado público. Una rebaja en la factura más que considerable teniendo en cuenta que, aun así, los 55.000 puntos de luz que hay repartidos por la ciudad suponen cada año para las arcas municipales un desembolso de más de seis millones. En su objetivo de reducir al máximo el gasto eléctrico, la Agencia Municipal de la Energía va a destinar 900.000 euros a la adquisición de 138 equipos reductores-estabilizadores de flujo luminoso que se instalarán en las calles que aún carecen de estos dispositivos, que actualmente representan el 20% del total. Su ubicación abarca a todos los distritos de la capital además de áreas industriales como los polígonos Trevenez y Guadalhorce, el Parque Tecnológico o varios tramos de la antigua N-340, la ronda Oeste y la carretera Azucarera-Intelhorce.

Cuando se complete la red la implantación de esos sistemas se inició en 2009, el ahorro se verá incrementado en unos 300.000 euros anuales a partir de 2014. La compra e instalación de estos equipos acaba de salir a concurso, con un plazo de ejecución de tres meses. La empresas interesadas tienen hasta el 16 de septiembre para presentar sus ofertas, de forma que la adjudicación no se realizará al menos hasta un mes después. De este modo, la previsión es que los nuevos dispositivos puedan estar funcionando en el primer trimestre del próximo año.

Vapor de sodio

De momento, en el Consistorio siguen apostando por las bombillas de vapor de sodio (reconocibles por su luz amarilla) al considerar que son las más eficientes que existen en el mercado. Además de su rendimiento energético (16.000 horas de funcionamiento), su principal ventaja es que permiten graduar la luz desde la cabecera de cada línea de alumbrado, a diferencia de las lámparas de halogenuro metálico (de luz blanca e instaladas en puntos emblemáticos de la ciudad) que tienen que ser reguladas una a una, por lo que el ahorro que aportan se disipa con la adquisición de equipos reductores en cada farola. En cuanto a las Led, en el Consistorio siguen estudiando su idoneidad (hay 240 luminarias de hasta siete marcas distintas en el Paseo del Parque y alrededores como los jardines de Pedro Luis Alonso, Puerta Oscura y la Coracha) dado que su coste inicial es más elevado.

Pero además de rebajar el consumo energético con la instalación de nuevos equipos reductores, en el Ayuntamiento también están ahorrando con lo ya existente. En este sentido, cabe recordar que el pasado mes de julio se adjudicó el mantenimiento del alumbrado público de la ciudad por un importe global de 4,9 millones de euros, de los que 1,6 se destinarán a inversiones para optimizar los flujos luminosos