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EUGENIO CABEZAS eugeniocabezas@gmail.com
Jueves, 9 de mayo 2013, 13:40
Las abundantes lluvias del pasado invierno y la húmeda primavera que por ahora vive la provincia están contribuyendo a romper la tendencia negativa de los últimos años en la cosecha de nísperos de Sayalonga. La pequeña localidad de la comarca de la Axarquía, con apenas 1.600 habitantes, presume de ser la capital provincial de esta fruta originaria de los países asiáticos, y cuyo cultivo se introdujo en el municipio a finales de los años setenta gracias al impulso del entonces alcalde socialista, Miguel del Pilar, quien apostó por diversificar los cultivos tradicionales, de la vid y el olivo, con una especie de árbol frutal típico de Japón y China, que se adaptaba perfectamente al clima local, caracterizado por la suavidad de las temperaturas.
Tres décadas después, Sayalonga sigue sacando mucho jugo a sus nísperos, y además de venderlos en fresco, prepara otros manjares como la mermelada o el licor de nísperos. Sin embargo, ambos productos, aunque se elaboran con la materia prima del municipio axárquico se procesan y envasan en Montejaque, en la cooperativa Al-Jaque, ya que en Sayalonga no existe una empresa que se dedique a ello de manera específica.
Denominación de origen
Este es uno de los retos que se ha fijado el alcalde, Antonio Jesús Pérez (PP), a corto y medio plazo. «Nuestra espinita clavada es intentar conseguir una denominación de origen para el níspero de Sayalonga y promover la creación de industrias de transformación. Tenemos licor de níspero y mermelada que se comercializan en el municipio, pero que se hacen fuera. Lo que queremos es que ese valor añadido que aporta la transformación del producto se quede en el pueblo», argumentó ayer el regidor con motivo de la XXIX edición de la Fiesta en honor al fruto más típico de Sayalonga.
Durante la jornada festiva, el Ayuntamiento procedió al reparto gratuito de más de dos mil kilos de nísperos entre los asistentes, que superaron los ocho mil, según estimó el regidor, quien destacó que la celebración está «muy consolidada» en el calendario festivo, pues no en vano está declarada como de Singularidad Turística de Málaga por la Diputación y de Interés Turístico Nacional de Andalucía por la Junta de Andalucía.
El alcalde avanzó que el Ayuntamiento tiene en su patrimonio unas antiguas granjas «que estamos arreglando y adaptando para reconvertirlas en naves industriales, que faciliten la implantación de empresas que apuesten por la transformación de nuestros productos y creen empleo», añadió. «Nuestra intención es alquilarlas a precios razonables», apuntó.
La cosecha de nísperos de Sayalonga este año alcanzará las 200 toneladas, lo que supone alrededor de un 25% más que en 2012, según estimó el administrativo de la cooperativa San Isidro Labrador de la localidad, Miguel Ángel Sánchez. Las cajas de 5,5 kilos de fruta de tamaño extra a ocho euros, y de seis kilos de menor calibre por cuatro euros, se vendían ayer por decenas en las instalaciones, situadas junto a la carretera que comunica con Cómpeta. «Cada vez hay más vecinos que están cultivando, ya somos unos 300 socios», dijo Sánchez.
El 80% de la producción de nísperos se comercializa en los grandes mercados de Andalucía, Madrid, Barcelona y el norte de España. El 20% restante se exporta a Francia y Bélgica. En uno de los puestos del mercadillo artesanal estaban los onubenses Manuel Benchi y María Garfía, quienes elaboran también el licor de nísperos de Sayalonga en su destilería, fundada en 1895 en Higuera de la Sierra (Huelva).
Pregón musical y premiados
El pregón de la XXIX edición de la fiesta corrió a cargo del cantante malagueño de Danza Invisible Javier Ojeda, quien confesó su afición a los nísperos y su admiración por los pequeños pueblos del interior. «Es una fruta muy sabrosa, con sabor de amor», dijo en alusión a su mítica canción. En el apartado de los reconocimientos, el Ayuntamiento entregó el 'Níspero de Honor' a la ONG Cáritas; a nivel provincial, a la Fundación Cueva de Nerja; y a nivel local, a la practicante Virginia Márquez, con cuarenta años de experiencia profesional.
son las toneladas de nísperos que se esperan cosechar este año en la localidad de Sayalonga, lo que supone alrededor de un 25% más que en la campaña anterior.
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