El fiscal del juicio a la madre de Camelia rebaja la petición de condena de 21 a 16 años de prisión

Fernando Torres

Martes, 17 de noviembre 2020, 14:14

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El juicio a la madre de Camelia, la bebé de 17 meses que fue abandonada en un piso cerrado con llave hasta morir, ha encarado hoy su recta final. Tras la declaración de varios testigos y peritos en la segunda sesión del procedimiento de jurado popular, el fiscal ha pronunciado sus conclusiones definitivas, en las que ha rebajado su petición de condena. En la calificación inicial pedía 20 años de prisión por un delito de asesinato con alevosía y un año de privación de libertad por otro de abandono temporal de menores. Tras la celebración de las dos sesiones y el reconocimiento de los hechos por parte de la acusada, ahora el representante del Ministerio Público ha rebajado su solicitud a 15 años por el asesinato, la pena mínima para este delito.

El fiscal ha justificado esta modificación ante el jurado popular destacando que la procesada ha mostrado arrepentimiento y no ha entorpecido el procedimiento. Por su parte, la defensa de la madre de Camelia se ha adherido al nuevo escrito de calificación de la Fiscalía. Antes de que se celebrase el juicio, el letrado de la madre, José Luis Rodríguez Candela, pedía una pena de 5 años de cárcel ya que consideraba que habían concurrido varias eximentes por consumo de sustancias y la situación de desamparo social en la que se encontraba la madre. Finalmente, tras la modificación de la Fiscalía, ambas partes se han mostrado de acuerdo en los 15 años por asesinato y uno más por abandono de menores.

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Tras esta segunda sesión del juicio –estaban previstas cinco jornadas–, se han celebrado todas las pruebas periciales y testificales, por lo que este miércoles el jurado popular, compuesto por seis hombres y cinco mujeres, analizará los hechos objeto de veredicto y se pronunciará, poniendo fin al procedimiento. Finalmente será la magistrada que ha presidido el juicio quien deberá fijar la pena que cumplirá la madre de Camelia.

Tras la celebración de todas las pruebas, la jueza ha ofrecido a la madre ejercer el derecho a la última palabra. Su respuesta ha sido similar a lo que pronunció en su primera testificación: «Que lo siento mucho, me arrepiento muchísimo de lo que he hecho».

A lo largo de esta segunda sesión de juicio han declarado tres personas que pertenecían al entorno cercano de la madre los meses antes de que se descubriese el cuerpo sin vida de Camelia en un piso de la calle Viento. Dos amigas y quien era su pareja sentimental han confirmado al fiscal lo que ya se recogía en el escrito de calificación: la madre mantenía una vida social activa y decía a todos que su bebé estaba a cargo de una cuidadora.

Entre las respuestas de los testigos ha destacado el relato de quien era su pareja sentimental sobre el día en el que la procesada fue detenida. «Cuando me dijo lo de su hija la encerré en mi piso y fui corriendo a la policía». El joven, que ha dicho que temió por su vida, acudió con dos efectivos policiales al domicilio y allí la arrestaron –en ese momento ya estaba siendo buscada por todos los agentes presentes en el Centro de Málaga–.

Por su parte, los peritos se han ratificado en los distintos informes que redactaron tras el hallazgo del cadáver de Camelia y la detención de su madre. En la parte forense, los expertos encargados de redactar el informe con la data de la muerte han afirmado ante el jurado que esta se produjo entre 20 y 31 días antes de que se diese con el cuerpo. Además, en la parte psicológica y psiquiátrica, los forenses que analizaron a la procesada se han reafirmado con respecto a su evaluación: la madre del bebé no tenía el juicio nublado y responde al perfil de delincuente por conflicto, es decir, el que reacciona ante una situación de estrés o alta carga emocional.