
VADEJUEGOS
Miércoles, 1 de mayo 2013, 13:20
No cabe duda de que toda valoración de un videojuego cuenta con un innegable trasfondo subjetivo basado en los gustos y expectativas de aquel que lo juega. Un videojuego que a alguien le puede parecer una maravilla, resulta ser un castigo infumable para el de al lado. Y esto ocurre tanto con los videojuegos, como con las películas, libros, cómics, discos de música y así un largo etcétera.
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