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La oferta de comida rápida en la provincia sigue creciendo y diversificándose con populares cadenas procedentes del otro lado del charco. Así, tras la apertura a finales del pasado agosto del primer local en la capital de Five Guys, ahora llega el turno de otro gigante americano: Popeyes. La enseña, fundada en 1972 en Estados Unidos, acaba de aterrizar en Plaza Mayor y ultima el desembarco en el centro comercial Vialia donde en breve inaugurará el que será su segundo establecimiento en Málaga.
Para celebrar su debut en la capital, la empresa ofrece estos días una suculenta promoción al hacer un pedido. «¡No te quedes en casa! Ven a probarlo con un 50% de descuento registrándote en la App y descubre cuales son los menús certificados por los grandes de la gastronomía playera de Málaga», anuncian en su cuenta de Instagram.
Y es que con motivo de su apertura en la ciudad la cadena ha invitado a responsables de «lo mejorcito que nos ofrecen vuestras playas cuando nos rugen las tripas… ¡los chiringuitos», aseguran. «Ellos controlan de espetos y saborcitos buenos pal' paladar y les hemos invitado a probar nuestra carta y que certifiquen nuestra calidad, el pollo fresco y todo su sabor, hecho en Málaga», añaden en sus redes sociales.
Popeyes tiene 45 años de experiencia y más de 3.100 restaurantes en 25 países de todo el mundo. Su oferta trata de trasladar la comida de Luisiana, caracterizándose por sus recetas al estilo de Nueva Orleans. Además, en el caso de España la firma -una de las mejor valoradas de EE UU- ha adaptado su oferta a los gustos locales. De este modo, su carta incluye en nuestro país opciones de pollo a la plancha, como los nuggets o la pechuga de pollo grilled que usan en sus sándwiches, wraps y ensaladas, hechas con pechuga fresca marinada en sus especias.
La cadena cuenta en Andalucía con otros dos establecimientos en Granada. Entre sus puntos fuertes destaca su receta secreta de distintas especias que le confiere el sabor diferencial al pollo, que posteriormente se marina durante doce horas y se prepara y reboza a mano. Este proceso permite asegurar que el producto esté siempre crujiente por fuera y mantenga la jugosidad en su interior, según defiende la empresa.
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