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La Empresa Malagueña de Transportes (EMT) sigue tratando de cuadrar cuentas ante la pérdida de un 90% de viajeros registrada en los autobuses urbanos desde que se decretó el estado de alarma. Tras acordar con los sindicatos un primer Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) que afecta a los 45 trabajadores que tenían contrato en interinidad, la sociedad municipal ha ofrecido al resto de la plantilla la posibilidad de acogerse a este mismo expediente de forma voluntaria. Para ello, ofrece unas condiciones pactadas con el comité de empresa que mejorarían lo establecido por ley , como el abono mensual de 600 euros brutos al margen de la prestación que les corresponda por desempleo o el hecho de que no se aplicará proporcionalidad en vacaciones, pagas extras o cualquier otro concepto que pudiera verse alterado por la suspensión del contrato.
En principio, el plazo dado para los trabajadores que puedan acogerse al ERTE se mantendrá abierto hasta el próximo lunes 30, ya que la intención de la compañía es iniciarlo a partir del martes 1 de abril, aplicando el carácter retroactivo a aquellos empleados que estuviesen actualmente de vacaciones o permiso. Aunque la propuesta consensuada por dirección y sindicatos contemplaba la posibilidad de prolongarlo hasta el 30 de junio, la duración del ERTE sólo se podrá extender durante el tiempo que se mantenga el estado de alarma, tal y como ha decretado el Gobierno este sábado. Además, a su finalización se garantiza la vuelta de los trabajadores en las mismas condiciones laborales.
En función del número de trabajadores que decidan acogerse a esta medida, la EMT dará prioridad a aquellos que se encuentren en situación de riesgo por Covid-19, a los que tengan hijos o mayores a su cargo y, por este orden, a los que tengan más antigüedad en la empresa.
De momento, son dos las empresas del 'holding' del Ayuntamiento de Málaga que han acudido a un ERTE para paliar la caída de ingresos como consecuencia de la pandemia. Además de la EMT, la Sociedad Municipal de Aparcamientos (Smassa) comunicó hace unos días al comité de empresa (sin negociación previa) que va a mandar al desempleo de forma temporal a los 34 trabajadores adscritos al servicio de SARE dado que la zona azul no se está aplicando desde que se decretó el estado de alarma. Se trata de todo el personal vinculado a la zona azul (25 vigilantes, dos inspectores y el resto técnicos auxiliares de administración y mantenimiento).
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