Las 'maestras' malagueñas salen a escena en el Master final de Menorca

Un año de tensiones, frustraciones, continuos bailes de parejas pero también un año de aprendizaje. La primera 'maestra' en salir a escena en estos cuartos de final será Navarro, este jueves, a las 16.30 horas. Aunque se hará extraño para los aficionados del pádel no verla de la mano de la pareja con la que ha competido los últimos once años, Ceci Reiter. Una lesión y posterior paso por quirófano la obligó a retirarse (este curso) hace tres meses; sin duda, el peor recuerdo del año para la malagueña, que tuvo que mover cielo y tierra para conseguir a una nueva compañera. La elegida fue la argentina de 26 años Aranzazu Osoro. «Ha sido muy fácil la adaptación, lo único que era más difícil era que llevo once años jugando con Ceci, que es zurda y Aranza es diestra; son jugadoras muy diferentes, pero he conseguido adaptarme bastante bien», valora Navarro, que junto a ella firmó su mejor actuación de esta campaña, el puesto de semifinalista del Máster de Barcelona.

Ahora llegan a Menorca como la pareja número siete del 'ranking', cumpliendo con su meta de este 2020. «Es una satisfacción el mantenerme ahí arriba y seguir luchando, otra vez en el Máster. Una nunca sabe cuándo será el último. Tengo el privilegio de poder estar entre las mejores parejas de nuevo. Eso sí, al Máster llego bien pero muy cansada, porque ha sido una temporada muy dura física y mentalmente», asegura la veterana. Su único gran objetivo cara a este último reto: disfrutar lo máximo posible. En parte porque nada más comenzar, Osoro y ella se medirán a las líderes del 'ranking', Gemma Triay y Lucía Sainz: «Nos han tocado las números uno, así que con poder jugar, disfrutarlo y dar nuestra mejor versión, ya será una victoria».

Teniendo en cuenta que ha sido una de las campañas más igualadas en categoría femenina (con los títulos de campeonas muy repartidos), ni Navarro ni Bea González se atreven a vaticinar el nombre de la dupla vencedora de este Máster. «Ojalá seamos nosotras», bromea la benjamina de la provincia. 'La perla de El Palo', como ya la han apodado en el circuito, comenzó el año siendo noticia al unir su camino al de la número uno mundial, Marta Ortega. Una relación que no fructificó y acabó por romperse hace dos meses, cuando la madrileña optó por regresar con la que fuera su compañera, Marta Marrero, quienes también acudirán a Menorca. Pero, ¿cómo vivió la malagueña este cambio? «Así es el deporte, nunca sabes lo que va a pasar de un día a otro, ella recibió la llamada de Marrero y pensó y decidió que con ella, por el motivo que fuese, iban a formar una pareja más dura», afirma. En aquel momento, la solución más factible fue la de unir lazos con la que era la pareja de Marrero, la revelación del circuito de la pasada campaña, Paula Josemaría, sobre la que valora: «A mí siempre me ha encantado, es una jugadora muy potente y competitiva. Tenemos un juego muy parecido y sabía que juntas haríamos grandes cosas».

Y lo han hecho, en este escaso tiempo, incluso ganaron a las 'Martas' y disputaron una final del Open de Las Rozas, como la dupla más joven del circuito y que actualmente cabalga entre el tercer y cuarto puesto del 'ranking' (por la diferencia de puntos al haber competido por separado buena parte del año). Arrancarán los cuartos de final de Menorca mañana viernes, a las 12.00 horas, ante la dupla número seis, Eli Amatriaín y Patri Llaguno. «Sabiendo que, desde el primer partido son rivales muy duras, me iría satisfecha sabiendo que lo hemos dejado todo desde la primera hasta la última bola, disfrutando y compitiendo independientemente del resultado. Estar ahí en el Máster final y jugarlo ya es un premio, motivo de satisfacción», se sincera la paleña, que aunque todavía no lo ha hecho oficial, todo apunta a que formará pareja el próximo año con una de las actuales números uno.

Y es que la malagueña, una de las jugadoras con mayor proyección del mundo, se resiste a dejar de soñar con lo más alto. Aunque todo a su debido tiempo. «Con Marta Ortega no he sentido en ningún momento esa presión por tener que igualar su número uno. Eso es algo que llegará cuando tenga que llegar, mientras, hay otras muchas cosas por las que preocuparse», afirma. Lo importante es el ahora. «Llegamos al Master en muy buen momento y con más ganas e ilusión que nunca».