El Príncipe Felipe, de boda en Málaga

La agenda oficial del Príncipe Felipe luce totalmente inmaculada para el próximo sábado. En cambio, la agenda privada lleva marcada en rojo una de sus citas más importantes desde hace meses. Se casa uno de sus mejores amigos y uno de los solteros de oro españoles, Álvaro Fuster, a quien conoció en el colegio y que desde entonces ha formado parte de su selecto grupo de íntimos. De hecho, el chalet de la familia Fuster sirvió de escondite en los tiempos en que don Felipe salía con Isabel Sartorius y Eva Sannum. Por eso el Príncipe no se puede perder el enlace y posiblemente estará en Málaga como testigo del novio, de ahí que también se espera que viaje junto a él la Princesa Letizia.

Sin embargo, la pareja real no hará noche en Málaga. O al menos no han reservado hotel. Todo apunta a que llegarán directamente al enlace religioso, que se celebrará en la ermita con la que cuenta la Hacienda Nadales, donde después se ofrecerá el catering para más de 400 invitados. Junto con el Heredero, se darán cita muchas caras conocidas, como Amaia Salamanca y Rosauro Varo, Pepe Barroso y algún otro Borbón, además de una larga e importante lista de empresarios españoles. La presencia de los paparazzis está asegurada, aunque la finca es todo un fortín contra miradas indiscretas y se ha reforzado considerablemente la seguridad.

A sus 45 años, Álvaro Fuster le dará el sí, quiero a Beatriz Mira, la malagueña que durante nueve años ocupó el corazón del cantante Carlos Baute. Pero el historial de Fuster no se queda corto: se especuló con una boda con Anne Igartiburu y tuvo lo suyo con la modelo y concursante de Supervivientes Elisabeth Thompson. Sin embargo, con Beatriz Mira, directora de comunicacion de la diseñadora Alma Aguilar (que firmará el vestido de novia), ha tenido un flechazo en toda regla. Solo necesitaron cuatro meses de relación para decidir que lo suyo era para toda la vida.