Borrar
Entre los últimos trabajos que ha desempeñado la compañía figura el nuevo acceso sur del aeropuerto de Málaga. :: Sur
Grúas Cabeza echa el cierre tras 48 años liderando el mercado
málaga

Grúas Cabeza echa el cierre tras 48 años liderando el mercado

La compañía, que llegó a tener 100 trabajadores y otros tantos vehículos, ha participado en todas las grandes obras de la provincia

NURIA TRIGUERO

Miércoles, 21 de diciembre 2011, 18:05

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Sus máquinas eran capaces de levantar miles de toneladas, pero no han sabido sostener el peso de la crisis. Cabeza, la empresa de grúas más antigua de Málaga y la tercera que se fundó en España, echó el cierre hace un mes, poniendo punto y final a 48 años de historia en los que lideró el mercado y participó en todas las grandes obras públicas que se han ejecutado en la provincia.

Según su exgerente, Carlos Pesquera, Grúas Cabeza dejó de existir como empresa el pasado 16 de noviembre «debido a la falta de trabajo por la crisis del sector de la vivienda y los recortes en la obra pública». «Llevábamos años perdiendo dinero y no podíamos seguir así», añade. Los alrededor de veinte trabajadores que quedaban en plantilla llegaron a un acuerdo con la propiedad para ser despedidos con una indemnización de unos 30 días por año.

«Hemos cerrado de forma ordenada, se le ha pagado a todo el mundo y no hemos tenido que ir a concurso de acreedores», afirma Pesquera, que considera «una pena» que la empresa que fundó en 1963 el fallecido Diego Cabeza haya tenido este final. Por su parte, el coordinador de transporte por carretera de Comisiones Obreras en Andalucía, Francisco Vegas, confirma el «mal momento» que atraviesa el sector de las grúas autopropulsadas por la caída de la actividad constructora. «Son compañías que han estado viviendo por encima de sus posibilidades durante la crisis, haciendo inversiones en vehículos muy caros que cuando no hay trabajo se convierten en una carga», opina. Por ahora, el de Cabeza es el primer cierre de una empresa de grúas en la provincia, pero los recortes de plantilla son moneda común en el sector.

Obras emblemáticas

Hasta el último día, Grúas Cabeza ha estado acompañando el desarrollo de las infraestructuras malagueñas. La segunda pista y el nuevo acceso sur del aeropuerto y la terminal marítima del puerto son las obras con las que esta histórica empresa ha dicho adiós. Pero a lo largo de su historia han sido muchas más; tantas que en Málaga se ha llegado a usar su nombre como sinónimo de grúa. «Para hacer esto hay que llamar a un cabeza», se solía decir.

El palacio de deportes Martín Carpena, la hiperronda, el soterramiento del AVE, las tres terminales del aeropuerto y el pantano de Casasola son solo algunas de las grandes actuaciones en las que ha participado una compañía que llegó a tener un centenar de trabajadores y otros tantos vehículos. Pero las grúas de Cabeza no solo han levantado el peso de estas infraestructuras, sino que han intervenido en otros trabajos muy diferentes, como el accidente de avión de Binter o el desplome de una de las grúas del muelle de contenedores del Puerto de Málaga. Sin contar, claro está, los miles de edificios de viviendas que ha ayudado a levantar durante los años dorados del boom inmobiliario.

La flota de Grúas Cabeza, de las más modernas y completas del mercado español, ha acabado repartida entre sus competidores después de que durante los tres últimos años sus responsables hayan ido vendiéndola poco a poco. Su plantilla también fue menguando poco a poco hasta quedarse en los ya citados veinte empleados que han sido los últimos en marcharse. «Conforme se iban acabando obras tuvimos que ir despidiendo a trabajadores», justifica el exgerente de la compañía. Algunos de estos profesionales han conseguido recolocarse en otras empresas del sector.

Dada la larga trayectoria de la compañía, esta no era su primera crisis. En 1992, la caída de la actividad amenazó su viabilidad, pero la compañía encontró una salida aceptando trabajos fuera de la provincia. Hasta a Lisboa llegaron a viajar las grúas de Cabeza durante esos años para participar en la construcción de su metro. A partir de 1998 el sector volvió a reactivarse en Málaga, dando comienzo la etapa dorada de esta empresa, en la que llegó a facturar más de 7 millones de euros anuales, según fuentes consultadas. Pero esta vez es diferente, según su ex gerente. «Las grandes obras han acabado en Málaga y en los años venideros no se va a hacer absolutamente nada», opina.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios