Barreiro: «El próximo año sólo contemplo el primer equipo»

Llegó sin hacer ruido, pero ante la perplejidad de muchos hombres de fútbol que se sorprendían de que el Cádiz se hubiese adelantado a varios clubes importantes. Manu Barreiro desembarcó en la Tacita en el mercado de invierno, procedente del Algeciras. «La cosa estaba muy mal y tuve que pelear mi baja porque no me dejaban marchar. Renuncié a los cinco meses de sueldo que me debían. Aposté fuerte para venir al Cádiz», recuerda este jugador gallego.

Jugaría en el filial, pero su única condición era poder entrenar con el primer equipo. «Es que se nota mucho la diferencia de ritmo, la intensidad y el toque de balón. Por ahora se está cumpliendo esa promesa», apunta Barreiro.

El principio fue difícil

Este canterano del Real Madrid (donde coincidió con Jesús) y del Valencia tardó en acoplarse, pero ahora se ha acostumbrado a golear cada jornada. «Al principio me costó un poquito porque no tuve suerte de cara al gol. Pero me he ido encontrando con más confianza y estoy en racha».

En diciembre recibió muy buenas ofertas económicas, «pero me la jugué, incluso bajando de categoría, y por ahora me está saliendo bien». No se agobia en debutar cuanto antes con los grandes, pero sí tiene una cosa clara. «Si me quedo la próxima temporada sería en el primer equipo».

Es un delantero alto y espigado (1,90 metros), pero maneja bien el balón con las dos piernas.

Hasta ha marcado de falta directa esta campaña. Además, tiene el mérito de trabajar durante toda la semana con un entrenador (Calderón) y jugar con otro (Procopio). «Eso es muy complicado y tienes que estar bien de cabeza. Y saber que en los dos sitios tienes que dar el callo. Porque aunque trabajo toda la semana con el primer equipo, la exigencia de lo domingos la tengo con el filial».

Ya ha sido convocado una vez con los mayores, en el partido ante el Castellón, y aunque calentó en la banda al final no pudo saltar al terreno de juego.

Fue un paso más, y pronto llegará el definitivo. «Intento no meterme pajaritos en la cabeza. Sé que este año tengo que rendir en el B. Ya veremos en el futuro más próximo».