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FINAL. Poco después de cumplir los 18 años dejó el monasterio.
El pequeño lama cambia de plano
VIVIR

El pequeño lama cambia de plano

Fue el primer niño español considerado la reencarnación de un líder budista, pero la severa educación del monasterio le hizo abandonar. Hoy, Osel Hita estudia cine en Canadá

TEXTO: PALOMA G. GUERRERO

Lunes, 20 de agosto 2007, 12:41

OSEL Hita, el primer niño español reconocido como la reencarnación de un lama cuando tenía tan sólo 14 meses, es hoy un joven de 22 años que ha abandonado sus estudios de 'geshe' o doctor en Filosofía Budista, Metafísica y Dialéctica para formarse como director de cine en Canadá. Osel decidió con 18 años posponer su formación budista, abandonar el monasterio universitario de Sera, en el Sur de la India, y viajar por Estados Unidos, Suiza, Italia y España, según explicó su padre, Francisco Hita. Reconocido por el Dalai Lama como reencarnación del lama Yeshe, quien falleció en California (EE. UU.) en 1984, este joven nacido en el pequeño pueblo de Bubión, en las Alpujarras de Granada, está destinado a ser el líder del budismo tibetano en Occidente y podrá retomar en el futuro si lo desea su formación como 'geshe'.

Cuando alcanzó la mayoría de edad decidió emanciparse y consideró firmemente que quería ser «una persona normal», sin interés por la popularidad y, según su padre, «está manteniendo esa discreción con firmeza y con alegría».

Añadió que su hijo «practica con total libertad los movimientos que desea hacer, toma las decisiones que considera y determina aquello que más le interesa realizar sin que le frenen fronteras, idiomas o culturas», y destacó que todo lo hace «en intimidad y privacidad». Sabe que está bien de salud, «contento con sus propósitos y también con lo que en la actualidad está haciendo», por lo que se siente «feliz y tranquilo».

Osel, que en tibetano significa 'Luz Clara', atravesó momentos difíciles cuando vivía en el monasterio de Sera Je, donde estaba obligado a estudiar 16 horas al día seis días a la semana.

Mensajes desesperados

Apartado de su familia siendo un bebé, el niño logró enviar en 1993 mensajes a su madre, María Torres, pidiéndole que lo sacara de allí; para paliar su soledad, su padre y uno de sus hermanos, Kunkyen, también monje ordenado, se trasladaron a dicho monasterio.

Algunos de sus vecinos de Bubión creen que a este joven se le «robó» su infancia al obligarle a ingresar en un monasterio ubicado a 8.000 kilómetros de su casa y se preguntan qué pudo haber detrás de esa decisión.

Sus padres, ahora divorciados, pertenecían a la comunidad budista organizada en torno al centro Oseling, en Bubión, donde vivió el lama Yeshe. Por eso, cuando el lama Zopa, a quien el lama Thubten Yeshe le pidió que le buscase reencarnado, preguntó a María Torres si le importaría que su hijo fuera educado por los lamas budistas de Sera porque era el lama Yeshe reencarnado, accedió.

Comenzó entonces lo que sus tutores denominaron «el experimento educativo más excitante jamás realizado», al que Osel decidió poner fin a los 18 años.

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