Pejovic y Markicevic tiran del carro en un Antequera en rodaje

Segundo ensayo veraniego del Balonmano Antequera y segunda victoria. Tras vencer el pasado fin de semana al Puente Genil en Estepa, los hombres de Paco Castillo vencieron ayer en el pabellón Fernando Argüelles al Palma del Río, de la División de Honor Plata.

Fue un partido típico de pretemporada en el que ninguno de los dos equipos mostraron su mejor nivel y en el que ambos entrenadores repartieron muchos minutos entre sus jugadores. La afición del Antequera pudo disfrutar por primera vez del que es su nuevo equipo varias semanas antes de que arranque la competición. Y se pudieron sacar conclusiones bastante positivas.

La mejor es el nivel de los jugadores balcánicos que han llegado este verano. Especialmente, de Pejovic y Markicevic. El primero deleitó a la afición con un recital de goles de todo tipo durante los sesenta minutos y, el segundo, un jugador más sobrio, demostró que será uno de los pilares tanto en ataque como en defensa.

Ventaja

El Antequera no tardó mucho en abrir diferencias en el marcador, con tres goles materializados por estos dos protagonistas (7-3, minuto 8). Castillo utilizó desde el principio a la unidad balcánica y, luego, a la española comandada por Espigol, que rindió a un gran nivel, y Óscar Río. La defensa 6-0, con Savenco y Markicevic en el centro, fue muy difícil de superar para el Palma, que solo con los lanzamientos del cañonero Lubo pudo hacer daño.

En la recta final de la primera parte, el Antequera se durmió un poco y Moyano, al que se vio muy recuperado de la operación de ligamento cruzado, pudo hacer poco para que el Palma no recortara la desventaja en el marcador (13-10), que se había disparado hasta los ocho goles.

En la segunda parte, el Palma vendió cara su derrota y el Antequera jugó más a tirones. Los ataques superaron a las defensas y, por momentos, el partido se convirtió en un correcalles. Radulovic se sumó a la fiesta del Este y los extremos Juanan y Francis también colaboraron para que no se escapara el triunfo, que es lo de menos en este tipo de partidos.

Mijatovic relevó a Moyano bajo palos en la segunda parte y sacó buenos balones. A falta de diez minutos para el final, el Palma logró ponerse a dos goles (23-21), pero un nuevo arreón de los locales sentenció el choque.