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EFE
Miércoles, 24 de julio 2013, 19:48
Pasajeros afectados por molestias gastrointestinales que viajan en el 'Empress', barco de la compañía española de cruceros Pullmantur en navegación por los fiordos noruegos, han demandado del servicio médico de la nave un diagnóstico de los enfermos tras cuatro días en cuarentena.
"Lo único que pedimos es que nos den un informe médico y que nos hagan un diagnóstico porque hasta día de hoy no sabemos qué tienen", ha asegurado hoy a Efe en conversación telefónica la esposa de uno de los afectados, Estefanía Torres, que está de viaje de novios y que se reunió ayer junto a otros pasajeros con el capitán del barco.
Explica que Pullmantur les dijo que "ellos habían hecho todo lo que podían", pero no recibieron respuesta ni solución a su solicitud de trasladar a un hospital a las personas que estaban peor.
Alrededor de un centenar de personas, entre pasajeros y tripulación, han sufrido molestias gastrointestinales, según Pullmantur, que aseguró ayer haber puesto en marcha los protocolos pertinentes, extremándose las medidas de higienización, limpieza, esterilización y desinfección de las instalaciones.
También explicó que se informó de la incidencia a las autoridades locales, mientras el buque prosigue la ruta prevista.
Torres ha informado de que a algunos afectados se les han realizado análisis de orina y heces y, aunque les informan de que los resultados son satisfactorios, no les ofrecen el diagnóstico.
Los médicos, "desbordados"
Afirma que los médicos se han visto "desbordados", que "no había medicamentos suficientes" y que "no había comida preparada para unas personas que tienen un problema gastrointestinal".
Un grupo de unos cincuenta afectados ya se han organizado para interponer una reclamación colectiva a la compañía tras su regreso a España y permanecerán en el barco "salvo que empeore la situación". Los afectados creen que la enfermedad es una intoxicación alimentaria y piensan que puede ser salmonelosis.
Estefanía Torres y su marido, Benjamín, celebraban su luna de miel en el 'Empress', él enfermó tras 18 horas a bordo con "vómitos, dolor fuerte de estómago y diarrea", síntomas que han tenido los demás, que incluso han sufrido fiebres altas como su marido.
Tras tres días enfermo en su camarote, donde los médicos les han visitado una vez al día, él está mejor y ella lamenta que desconozcan qué medicamentos están repartiendo y que no pregunten si son alérgicos.
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