José Gámez: «Hay que buscar horizontes para que los vecinos no se vayan del pueblo»

José Gámez Gutiérrez (IU) es de los candidatos que sin experiencia política previa arrasaron nada más presentarse a unas elecciones municipales. Su secreto es gobernar de otro manera, hacerlo para todos sus vecinos sin distinción y de la forma más equitativa y justa, a la vez que ofrecer los mismos servicios de una ciudad.

-¿Cómo se consigue, sin tener experiencia previa en política, ganar por mayoría absoluta y además en dos ocasiones?

-En un pueblo pequeño como Almáchar se consigue evitando agravios. La política que proponíamos ha sido entendida porque veníamos de un gobierno que discriminaba. Los vecinos han visto que repartimos de manera más justa. Nos podemos equivocar o no, pero somos transparentes y además no prometemos cosas que no podemos cumplir y gestionamos bien el dinero, de manera que hemos montado un sistema de amortiguación social, pagando a proveedores, que está funcionando y que nos permite atender a las familias en riesgo de exclusión social.

-¿Qué balance hace desde su llegada a la Alcaldía en 2007?

-El balance es positivo. Puedo presumir de no haber dado nada a dedo y mejorar la transparencia para que todo el mundo sepa a dónde va el dinero público, algo que en un pueblo pequeño se ve mucho más. Y algo muy importante, cuando el Ayuntamiento hace alguna actuación en el pueblo, nadie le debe nada al equipo de gobierno. Eso es algo que hemos conseguido en estos años.

-¿Y la crisis cómo les afecta??

-Con una crisis que ha venido para quedarse, la percepción de los vecinos no puede ser buena. Aunque creemos que repartimos mejor, el Ayuntamiento no puede generar empleo. Podemos atenuar los efectos de la crisis. No obstante, cuando los vecinos van a otras localidades ven que en Almáchar tienen guardería gratuita, acceso a las instalaciones, un tejido asociativo, que hay familias en riegos de exclusión a las que se les ayuda o un comedor escolar que apoyamos y en el que de 198 niños están comiendo 140 subvencionados. También ven que existe un reparto diferente. Es la época que nos ha tocado gestionar, pero a pesar de todo tratamos de hacer obras volcándonos sobre todo en la creación de mano de obra.

-¿Es más fácil gobernar un pueblo pequeño que uno grande?

-Si te equivocas en un pueblo pequeño se pierde mucho más respaldo que en un municipio grande, pero es mucho fácil controlarlo todo.

-¿Tiene intención de volver a presentarse como candidato en las próximas elecciones municipales?

-Mientras que tenga la sensación o perciba de que el pueblo confía en mi y entienda mayoritariamente que soy el más adecuado para regir los recursos del municipio, por supuesto que volveré a presentarme. No hay nada que le enorgullezca más a un vecino de un pueblo que ser su alcalde. Eso suple cualquier problema que pueda conllevar el cargo e incluso las dificultades muchas veces de compatibilizar la vida familiar con el ejercicio en la Alcaldía, porque el cargo no tiene horas. Mientras que me vea con fuerzas, ánimo y perciba que hay gente que piense que debemos seguir, seguiré presentándome, voy a estar ahí, no les voy a fallar. Me siento preparado y cada vez se más de la gestión municipal.

-¿Presume usted de algo?

-De que no se haya perdido ninguna subvención. Es más hemos conseguido recuperar subvenciones que estaban perdidas.

-¿Qué opina usted sobre la reforma de la Administración Local que elabora el Gobierno del PP?

-Que a los pueblos pequeños nos condenan al ostracismo, que tenemos que pagar siempre los más débiles los platos roto de la crisis. Almáchar ha estado históricamente abandonado por las administraciones. Tras 35 años de democracia se ha conseguido que nos tengan en cuenta. Hemos logrado, con los recursos que tenemos, ponernos a nivel de las ciudades, pero con la reforma de la Administración Local, que reforzará el papel de la diputaciones, retrocedemos 30 años, porque el Ayuntamiento va a perder numerosos servicios.

-¿Qué le quita el sueño?

-Ahora, la reforma de la Administración Local, el desempleo y buscar horizontes a los vecinos porque somos un pueblo pequeño, aunque con muchos servicios. Somos uno de los pocos pueblos del interior de la Axarquía, del medio rural, que está creciendo en número de habitantes. Y eso es porque tenemos los mimos o casi los mismos servicios que puedan tener los habitantes de cualquier ciudad. Lo que me preocupa es buscar horizontes para que la gente no se vaya de Almáchar y generar empleo con la agricultura y el turismo rural.

-¿Existe turismo rural en la localidad?

-Sí. De hecho, el turismo rural está haciendo que muchos extranjeros se queden a vivir y que el volumen de venta de algunos negocios esté subiendo. Gracias a ello, a pesar de la crisis, en Almáchar no ha cerrado ni un sólo bar.

-¿Y la agricultura qué papel juega?

-Los almachareños deben engancharse a los cultivos subtropicales, pero la formación es fundamental. Hemos perdido una generación que podía estar muy preparada y que al albor del dinero fácil y la construcción no se ha preparado. Hay que aprovechar los recursos de la agricultura, que por fortuna nunca se abandonó. Aquí, cuando la gente ganaba dinero a espuertas invirtió en sus tierras. Además tenemos unas viñas con mucha fama gracias a los vinos que elabora Bodegas Ordóñez. La agricultura no da para vivir, pero si da para subsistir.

-¿Cuál es el futuro de Almáchar?

-Pasa por aprovechar bien los recursos naturales que tenemos e intentar quedarnos con el valor añadido de los productos, así como por aprovechar también nuestra cercanía a la Costa del Sol poniendo en valor los recursos turísticos que tenemos, pero haciéndolo en colaboración con otros pueblos. A las personas que nos visitan les gusta el pueblo, la comida, el paisaje, pero no tenemos un paquete para vender y que repitan. En este sentido, vamos a poner en marcha un taller de empleo mancomunado entre Almáchar y El Borge para poner en valor nuestros recursos turísticos.