Soliva ya está ocupada al 60% pero carece de locales y de equipamientos

La nueva barriada de Soliva, entre El Cónsul y Puerto de la Torre, se sigue llenando de vida con cada acto de entrega de llaves que realiza el Instituto Municipal de la Vivienda (IMV). Ayer les tocó el turno a 154 familias que, casi cuatro años después del sorteo celebrado para adjudicar los pisos, pudieron entrar en ellos y empezar a disfrutar de una nueva vida en esta zona de la ciudad. Sin embargo, todavía no pueden hacer un uso total del barrio porque aún hay varios edificios que están en obras y todavía no ha abierto local comercial alguno. Puede que en los próximos días lo haga una farmacia, que sería el primer establecimiento en abrir sus puertas.

Con la entrega de ayer, Soliva ya está al 60% de ocupación. Se han dado las llaves de 974 pisos de los que 658 son en venta y 316 de alquiler, incluida una promoción de 99 casas que fue realizada por La Caixa. La ejecución del resto corresponde al IMV, cuyos responsables confían en que para finales de este año puedan estar ocupados todos los bloques, aunque quedarán algunos pisos vacíos porque no se terminan de adjudicar 200 casas como ya informó este periódico (ver SUR 24/6/2010).

La firma de escrituras se ha acelerado en las últimas semanas para que las familias puedan escapar de al subida del IVA, de ahí que la proliferación de actos de entrega de llaves a los que acude el alcalde, Francisco de la Torre, y responsables de la Junta de Andalucía, que también ha contribuido con la nueva barriada aportando subvenciones a la ejecución de viviendas en alquiler y fondos para la urbanización de los proyectos de pisos en venta.

Sequía comercial

No obstante, la relativa agilidad con que se están ocupando los pisos en lo que va de año contrasta con la sequía en lo relativo a locales comerciales, lo que obliga a las familias a coger el coche para cualquier compra o gestión. Desde el IMV confiaron en que pronto puedan abrir sus puertas varios, desde la citada farmacia a una panadería y alguna academia. La barriada dispone de unos 150 bajos para negocios pero sólo se han vendido unos 30. El Ayuntamiento lanza periódicamente la oferta de estos locales por un procedimiento negociado con varios interesados pero por el momento no ha logrado vender la mayor parte de ellos. Además, ya se han ocupado unos locales que el IMV cedió a la empresa municipal Promálaga para establecer en ellos una incubadora de empresas.

En cuanto a equipamientos públicos, los proyectos también van al ralentí. Hay dos parcelas para uso deportivo de las que el IMV ya ha informado a la Fundación Deportiva Municipal para que las incluya dentro del plan para la creación de instalaciones deportivas en la ciudad. No obstante, todavía no ha terminado la elaboración de ese plan y las actuales condiciones del mercado pueden complicar bastante la realización de estos equipamientos mediante concesiones a empresas privadas, como ha venido haciendo el Ayuntamiento con los últimos proyectos de piscinas y pistas cubiertas.

Por otro lado, también existe en Soliva una gran parcela central para la construcción de un centro educativo que quedará en manos de la Junta, que ya construye un colegio en un solar muy próximo a la zona.