Resuelto el primer ajuste de cuentas del desconfinamiento: tres detenidos por disparar en las piernas a un joven en Marbella

Juan Cano y Alvaro Frías

Málaga

Martes, 23 de junio 2020, 10:50 | Actualizado 22:01h.

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La víctima, un joven inglés de 27 años, ingresó en el Hospital Costa del Sol con cuatro tiros en ambas piernas. No quiso colaborar. Dijo que lo habían asaltado unos individuos de aspecto marroquí para robarle el reloj y que le habían disparado. La policía no se lo tragó.

La investigación se orientó desde el primer momento hacia la hipótesis de un ajuste de cuentas, el primero que se producía desde que se decretara el estado de alarma motivado por la pandemia del coronavirus. Las pesquisas ya han dado resultado. Hay tres detenidos.

Los hechos sucedieron la madrugada del 25 de mayo, apenas una semana después de que Málaga entrara en la fase 1 del desconfinamiento. El herido ni siquiera llegó al hospital marbellí en ambulancia. Lo llevó un 'amigo' en un coche particular y lo dejó en urgencias.

La Policía Nacional, que desconfió de las versiones de la víctima y del testigo, no encargó el caso al Grupo de Robos de la comisaría de Marbella, sino al equipo especial creado por la Comisaría Provincial para esclarecer los ajustes de cuentas, lo que daba una idea clara de la hipótesis policial. En las pesquisas también ha colaborado la Udyco y el Greco-Costa del Sol.

El supuesto 'amigo', que fue quien lo llevó al hospital, declaró a la policía que se había encontrado al herido en la calle. Trató con ello de desviar la atención de los agentes, que descubrieron el lugar exacto donde fue tiroteado: estaba a más de seis kilómetros del que inicialmente indicaron la víctima y el testigo. Mentían.

También consiguieron averiguar la marca y modelo de los vehículos utilizados por los agresores. Y siguiendo el rastro de los coches lograron identificar a los usuarios de los mismos. Así fue como descubrieron que la víctima y los autores pertenecían supuestamente a una misma organización dedicada al tráfico de estupefacientes.

Los investigadores concluyeron que había sido un «serio aviso» sobre las consecuencias de actuar en contra de lo que ordenaba la banda. El método de los disparos en las piernas es antiguo. Lo bautizó la mafia italiana como 'gambizzato' por su capacidad para lanzar un mensaje claro al resto de la organización o a otros grupos.

No en vano, las graves lesiones sufridas por la víctima en las rodillas posiblemente le dejarán, como mínimo, una cojera de por vida, según las fuentes consultadas. Los policías no han podido contactar de nuevo con ella porque nada más recibir el alta en el hospital de Marbella regresó a su país.

Con el avance de la investigación, los agentes detuvieron a tres varones como presuntos responsables del ajuste de cuentas. Dos de los detenidos eran ingleses, de 23 y 24 años. El tercer arrestado, de origen irlandés y 29 años, fue el encargado de fingir que colaboraba con los investigadores -fue el que llevó a la víctima al hospital- con el único fin de desviar la atención sobre los verdaderos responsables de los hechos, uno de los cuales era, supuestamente, él mismo. Los tres han ingresado en prisión.

Como ejemplo de esa falsa colaboración, en más de una ocasión acompañó a diferentes dotaciones policiales al lugar donde manifestaba que se había producido el suceso, localizándose a más de seis kilómetros de distancia del verdadero lugar de los hechos. Incluso llegó a fingir que ayudaba a los agentes en la búsqueda de restos de sangre, a sabiendas de que nunca los encontrarían allí.

Creyendo que los investigadores nunca sospecharían de la persona que asistió y acompañó a la víctima al hospital, los autores de los hechos acordaron ocultar el arma empleada en el domicilio de éste, situado en Marbella.

En los registros, los agentes localizaron el arma de fuego empleada –una pistola semiautomática- que estaba lista para ser utilizada (contaba con bala en la recámara y el cargador repleto de munición). Además, hallaron un silenciador y 140 cartuchos, así como la sudadera utilizada por la persona que efectuó los disparos, que contenía restos de sangre de la víctima.

Por otra parte, los agentes intervinieron tres vehículos sustraídos de los que disponía la organización para cometer los hechos con absoluta impunidad, según ha informado la Policía Nacional. La investigación continúa abierta.