«El Servicio de Ayuda a Domicilio se enfrenta a dos grandes retos: mejorar los precios de los pliegos y la dignificación salarial»
Entrevista a Javier Gallego Trigo, Director Regional Sur de Clece
Viernes, 20 de septiembre 2019, 09:17
¿Cuál es la experiencia de Clece en el Servicio de Ayuda a Domicilio y qué servicios gestiona en Málaga?
En primer lugar, me gustaría puntualizar que el Servicio de Ayuda a Domicilio constituye una de las prestaciones principales de la Ley de Dependencia. El Servicio de Ayuda a Domicilio (SAD) es una prestación de los Servicios Sociales del sistema público que proporciona un conjunto de atenciones orientadas a facilitar el desarrollo de las actividades básicas de la vida diaria a aquellas personas con limitaciones de autonomía personal.
En la mayoría de los casos estos servicios, que son públicos, son de gestión indirecta. Es decir, la administración pública convoca un concurso público para la prestación de estos servicios por parte de diferentes entidades.
Esta gestión indirecta genera una mayor eficacia de los servicios y un ahorro de costes para las administraciones, además de evitar que se incrementen indebidamente las plantillas de la función pública.
El bagaje de Clece en los Servicios de Ayuda a Domicilio es amplio puesto que comenzamos en este sector en 1999. En estos 20 años hemos acumulado una gran experiencia, convirtiéndonos en líderes de nuestro ámbito. En España atendemos a más de 120.000 personas en situación de dependencia y contamos con más de 30.000 profesionales especializados.
En Málaga empezamos a finales de 2001, incluso antes de que se aprobara la Ley de Dependencia, actualmente atendemos a más de 6.500 personas usuarias. Somos la empresa que más personas usuarias atiende con diferencia en la provincia. Para ello contamos con 3.300 trabajadoras, y hablo en femenino porque más del 95% son mujeres. Prestamos servicios en ciudades tan importantes como Marbella, Fuengirola, Rincón de la Victoria, o Nerja, Y sobre todo, cabe destacar que prestamos nuestros servicios de SAD a la Diputación de Málaga, que es una administración con unos altos estándares de calidad y referencia en nuestra Comunidad. Este servicio es especialmente complejo y su mayor peculiaridad es que las personas usuarias están muy dispersas por toda la provincia, principalmente en entornos rurales.
El Servicio de Ayuda a Domicilio es un servicio esencial y especialmente sensible para nuestra sociedad donde lo importante es el bienestar de las personas a las que atendemos, que son de nuestro entorno más cercano y que están en situación de vulnerabilidad. En Clece trabajamos siempre con el objetivo de ofrecer la máxima calidad de servicio, implementando todas las herramientas para que los usuarios estén mejor atendidos y los trabajadores desempeñen sus funciones de la mejor manera posible. De hecho nuestros servicios están muy bien calificados por nuestros usuarios y clientes, con niveles cercanos a los 9 puntos sobre 10.

En ocasiones hemos leído que las empresas pagan bajos salarios a sus trabajadores de SAD, que tienen jornadas cortas, ¿Cuál es su punto de vista en relación a esto? ¿No cree que habría que dignificar los empleos de unos trabajadores que realizan una actividad tan importante para la sociedad?
Me gustaría primero que entendiéramos la complejidad de este servicio y la alta capacitación de nuestras trabajadoras. Cada mañana, un amplio equipo de profesionales de Ayuda a Domicilio de Clece acude a multitud de hogares de personas usuarias dispersas por toda la provincia de Málaga. Es todo un reto diario, que requiere una organización muy eficaz para obtener el mejor servicio posible.
Por un lado, hay que tener en cuenta que los salarios de los trabajadores dependen de varios factores, que son ajenos a nosotros: por un lado, la administración pública competente es quien fija el precio del servicio a través de los concursos públicos, lo cual constituye la mayor de las limitaciones. Por otro lado, nos encontramos con que los horarios de nuestros trabajadores, marcados por las administraciones públicas, en muchos casos son cortos y poco flexibles. Lo ideal es ampliar y flexibilizar los horarios de atención, para facilitar la contratación laboral con jornadas más amplias que permitan, en lo posible, dar la mayor estabilidad en el empleo. Clece, y también algunas administraciones, estamos trabajando en ello con el fin de que los salarios sean más altos.
Por último, también hay que tener en cuenta los convenios colectivos, donde hay una gran disparidad en función de la zona geográfica. Por ejemplo, una auxiliar del Servicio de Ayuda a Domicilio de Málaga, con jornada completa, cobra por convenio unos 14.000 € brutos y en Vizcaya cobra más de 24.000 €. Nosotros estamos a favor de negociar convenios que mejoren las condiciones laborales de nuestros profesionales. De hecho, por primera vez Clece está participando en la negociación del convenio estatal de SAD.
Pero, como conclusión, es evidente que todo lo anterior sólo es viable si las administraciones públicas revisan al alza los precios por hora del servicio en los pliegos de los concursos, además de tratar de diseñar unos horarios más amplios y flexibles. Ambas acciones posibilitarían que las auxiliares mejoraran sus condiciones laborales. Claramente hay que dignificar esta profesión, fundamental en nuestra sociedad.
Sólo un apunte más: del importe que las administraciones destinan a los servicios de ayuda a domicilio, cerca del 50% del precio son impuestos que se revierten al sistema público en conceptos de Seguridad Social, IRPF, IVA e Impuesto de Sociedades.

¿Considera que este tipo de servicios sociales pueden constituir un factor que contribuya a frenar la despoblación de zonas rurales?
Sin duda. En nuestra región la despoblación es muy acusada y cada vez más pueblos se van vaciando año tras año porque no hay negocios o grandes industrias que den empleo a la población local. Por eso el sector de los cuidados, en especial, la atención a las personas dependientes, se está convirtiendo en uno de los mayores agentes de desarrollo de las zonas rurales. De hecho en muchos casos las residencias o los servicios de ayuda a domicilio en estas zonas rurales sirven para afianzar la población en los pueblos.
En definitiva, ¿cuáles considera que son los retos en el ámbito de la Ayuda a Domicilio?
Atender a todas las personas que tengan reconocido una situación de dependencia
Mejorar las prestaciones de servicio a las personas dependientes
Mejorar las condiciones laborales de los trabajadores del sector mejorando los convenios colectivos, que sean de obligado cumplimiento en los concursos públicos.
Mejorar la financiación de los servicios relacionados con la dependencia, adecuándolos a las necesidades reales del servicio.
Más información
Clece
Delegación Provincial de Málaga
C/ Pirandelo, 6 – bloque 3 – planta 4 puerta 4. Edificio Corona de Teatinos, 29010 Málaga.
Tlfn.: 952 64 06 25
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