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Oblaré y Caracuel junto a Salado, tras el pleno. sur

Francisco Oblaré y Francisca Caracuel: el adiós de dos veteranos de la Diputación de Málaga

Llevaban desde 2011 en la institución provincial y ahora renuncian a sus actas para tomar posesión como parlamentarios autonómicos

Miércoles, 13 de julio 2022, 11:56

La Diputación de Málaga ha dicho adiós esta mañana a dos de sus integrantes más veteranos. Francisco Oblaré y Francisca Caracuel han renunciado a sus actas en la institución provincial para tomar posesión, este jueves 14 de julio, como parlamentarios andaluces tras haber sido elegidos en las pasadas elecciones autonómicas del 19 de junio. Aunque no había incompatibilidad, ambos han decidido dejar unas actas que venían ocupando ininterrumpidamente desde 2011 y que les hacía ser, junto al presidente del ente supramunicipal, Francisco Salado -que ocupa un escaño desde 2007-, de los diputados de la actual corporación que más tiempo llevaban en el cargo.

Oblaré y Caracuel desembarcaron en la Diputación en junio de 2011, año en que el PP logró el gobierno provincial por primera vez con mayoría absoluta -en 1995 lo hizo en minoría-, y entraron a formar parte del equipo del entonces presidente, Elías Bendodo. Desde entonces han repetido tras las elecciones municipales de 2015 y 2019 y han ostentado importantes responsabilidades en los mandatos de Bendodo y Salado.

Así, Francisca Caracuel, actual vicepresidenta tercera, fue diputada de Economía y Hacienda, delegación desde la que pilotó la operación para equilibrar las cuentas de la Diputación y llegar, en 2018, a la deuda cero, mientras que Francisco Oblaré, que fue vicepresidente tercero y cuarto en anteriores mandatos, era actualmente el diputado de Fomento, del que dependen, entre otras cuestiones, las carreteras de titularidad provincial; y tenía las competencias en materia de Concertación (el principal plan que aprueba cada año la institución) y del plan agrario PFEA, además de ser el portavoz del grupo popular.

La marcha de ambos y su sustitución por Víctor Romero y María del Carmen Márquez obliga a Francisco Salado a acometer una remodelación del equipo de gobierno

La renuncia de ambos se ha llevado a cabo en un breve pleno extraordinario, del que se han ausentado algunos diputados a causa del Covid, y que ha comenzado con un minuto de silencio en recuerdo de Miguel Ángel Blanco -hoy se cumplen 25 años de su asesinato a manos de ETA- y de las víctimas del terrorismo.

Emociones y recuerdos

En su última intervención como integrante de la Diputación, una emocionada Francisca Caracuel ha puesto en valor que se ha hecho un buen trabajo, ha destacado que ha formado parte de un proyecto «apasionante» y ha reivindicado la política y el papel de los políticos. «Trabajamos con ilusión y con la vocación de servicio público para hacer una sociedad mejor. Con esa vocación me voy a Sevilla», ha subrayado, al tiempo que ha añadido que no deja la política local porque seguirá como concejal en el Ayuntamiento de Marbella.

Francisco Oblaré ha dicho sentirse «triste» por su marcha y ha leído unas palabras que escribió el día antes mientras escuchaba a uno de sus cantautores preferidos, Arco, y su tema 'Quisiera', para hacer un recorrido por su trayectoria de once años en la institución a la que vino desde el Parlamento andaluz, al que ahora regresa; para agradecer la confianza de Bendodo y Salado; para recordar a políticos ya fallecidos como Ignacio Mena, Juan Ramón Casero o Daniel Sánchez, a funcionarios de la institución que murieron como Carlos Hernández Pezzi, a los trabajadores de la Diputación y a sus compañeros de corporación tanto del equipo de gobierno como de la oposición. «Ha sido un placer ser diputado», ha concluido.

Por su parte, desde la oposición el diputado no adscrito Juan Carlos Maldonado ha agradecido a los dos diputados su «compromiso» con la provincia y les ha deseado una nueva etapa «fructífera». En la misma línea se ha expresado la portavoz de Unidas Podemos, Maribel González, y la viceportavoz socialista, Antonia García, les ha deseado «la mejor suerte y los mayores aciertos».

Mientras que Francisco Salado les ha dicho a Caracuel y Oblaré que se pueden ir «con el orgullo del trabajo bien hecho» ya que desde sus responsabilidades «trascendentales» han tomado decisiones que han contribuido a mejorar la calidad de vida de los malagueños y ha sostenido que ahora tienen un reto «importante» en una momento «histórico» para Andalucía con el nuevo Parlamento con mayoría absoluta del PP.

Un Salado que ahora deberá acometer una remodelación de su equipo de gobierno, al que se incorporarán como diputados, tras tomar posesión la próxima semana en el pleno ordinario de julio, Víctor Romero, concejal de Alhaurín el Grande, que sustituye a Oblaré como representante del partido judicial de Málaga, y María del Carmen Márquez, portavoz del PP en el Ayuntamiento de Ojén, que releva a Caracuel como integrante del partido judicial de Marbella.

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