El Gobierno autoriza el Torymus sinensis para luchar contra la avispilla del castaño

Peláez. Los castañicultores están de enhorabuena. La Dirección General de Sanidad de la Producción Agraria del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, a petición de la Red Estatal del Castaño, ha autorizado el uso del Torymus sinensis como organismo de control biológico contra la avispilla del castaño, un parásito que en el caso de la provincia ha provocado que la campaña de este año haya resultado todo un desastre.

Después de cinco años de la primera reclamación realizada por la Red y aunque en este periodo se han realizado sueltas experimentales por parte de las comunidades autónomas afectadas, ha llegado por fin la autorización definitiva.

Si bien, esta autorización fue anunciada por los representantes ministeriales durante la celebración de Biocastanea 2019 y por escrito a la Red Estatal del Castaño, fue este jueves 19, en una reunión celebrada al efecto, cuando el Ministerio comunicó a los representante del sector los pormenores de medida.

Según la Red Estatal del Castaño, la reunión sirvió también para sobre el estado de la situación del avance de la plaga de la avispilla a nivel nacional y los próximos pasos para minimizar su impacto en las producciones de castaña y en la conservación de este hábitat de interés comunitario, cuya conservación depende en gran medida de los castañicultores, que sólo en España son más de 100.000 productores.

Desde el Ministerio se ha trasmitido el interés existente por parte de las administraciones de las principales zonas productoras en seguir apoyando y financiando para el año 2020 la realización de nuevas sueltas, según la Red.

La plaga de la avispilla empieza a constatar las primeras pérdidas de producción en los castañares españoles con pérdidas de hasta el 50% en algunas variedades tempranas del Valle del Genal. Según Asaja, el sector de la castaña en Málaga ha facturado este año un 67% menos respecto a 2018, pasando de 5,92 millones a sólo 1,71 millones esta temporada. La Red Estatal del Castaño ha demandado ayudas transitorias al productor que minimicen las pérdidas.

La campaña andaluza de la castaña, que se concentra en la zona de la sierra de Aracena (Huelva) y el Valle del Genal (Málaga), ha concluido con una producción de unos cuatro millones de kilos, una cifra que lleva al sector a calificarla como «la peor que se recuerda en muchos años».