Vuelven los cromos, una tradición actualizada

El colegio La Biznaga, famoso por su localización y conocido por las distintas iniciativas y actividades que realiza, ha vuelto a hacerlo. En esta ocasión, cuatro alumnas de tercero de Primaria han sorprendido con una vuelta a una tradición ya pasada de moda: el intercambio de cromos. Esther Vega, Eva Shalsi, Alma de Castro y Allegra Marándola son las pequeñas que han iniciado un intercambio de cromos 'Lol Surprise' en la Plaza de la Merced.

Niños y niñas de otros colegios de la ciudad han acudido a la cita, de la cual se han enterado por distintas vías, entre ellas el portal 'La diversiva', una guía de ocio familiar, y la aplicación 'Wallapop'. Al encuentro han llegado una veintena de pequeños, acompañados por sus padres y con los cromos en mano, dispuestos a conseguir aquellas cartas que les faltan.

Los cromos Lol Surprise surgieron gracias a las muñecas con las que comparten nombre. El álbum apareció en los comercios y en plataformas de venta hará cosa de un año. Pero estas niñas descubrieron el fascinante mundo de la colección hace un par de meses y se han propuesto realizar la colección completa. Son 198 cartas en total y Esther, una de las propulsoras del intercambio, indica que «me quedan 9 cromos para completar el álbum». Las cuatros alumnas de La Biznaga decidieron salir del patio del colegio porque «entre nosotras ya teníamos todas las cartas repetidas y no podíamos cambiar. Queríamos conocer a más gente para intercambiar», comenta Eva. Sin embargo, no es tan fácil completar el álbum, «cuando te quedan unas dos o tres cartas es más difícil que te salgan, siempre se repiten», comenta Allegra.

Quienes más han disfrutado del momento han sido los padres. Ayudar a sus niñas con el intercambio de cromos los ha transportado a su infancia. Con papel y bolígrafo en mano, han marcado los nuevos cromos que han adquirido las pequeñas coleccionistas. Entre ellos piden cartas especiales, las más complicadas de conseguir, y asesoran a sus hijas para que adquieran las que más les interesan. «Esto es una tradición. Yo me acuerdo cuando nosotras de pequeñas hacíamos lo de los cromos, que nos hacía mucha ilusión. Ahora es más difícil que los cromos se cambien en la calle, por eso hemos apoyado esta iniciativa», comenta orgullosa María José Molina, madre de Eva.

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Un caso curioso de implicación es el del padre de Alejandra Vargas. Ella tiene su propio canal de Youtube, 'Las lokitas pelirrojas', donde cuenta cuáles son sus personajes favoritos y abre los paquetes especiales con cromos inéditos, mientras que su padre está disfrazado a su lado.

Lol Surprise ha sido una auténtica revelación para estos niños malagueños que los lleva a relacionarse con otros y a salir a la calle, dejando de lado las videoconsolas y las nuevas tecnologías. Una iniciativa que ha reunido a muchos pequeños con una misma ilusión: completar su colección.

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