El Ayuntamiento renovará la red de abastecimiento y saneamiento del pasaje la Unión y su entorno

El Ayuntamiento de Málaga renovará y remodelará las redes de abastecimiento y saneamiento del Pasaje la Unión y su entorno. Unos trabajos que permitirán también renovar la pavimentación del aparcamiento existente en la zona y eliminar barreras arquitectónicas.

La actuación, que correrá a cargo de Emasa, ha sido presentada esta semana por los concejales del Área de Medio Ambiente, Raúl Jiménez, y del distrito de Cruz de Humilladero, Teresa Porras, a los vecinos de la zona, donde la ejecución reciente de las obras del metro ha generado, según el Consistorio, algunas deficiencias en materia de drenaje que ahora también van a ser subsanadas.

Especialmente se trabajará en la parte comprendida entre Pasaje La Unión y la calle Reboul, que se utiliza para aparcar. Jiménez ha destacado la satisfacción trasladada por los representantes vecinales asistentes, "al quedar asegurados los servicios de la barriada y resolver los problemas de acerado y ordenación que existían".

Las obras, que se desarrollarán después de haber pasado estas infraestructuras a titularidad municipal, cuentan con un plazo de ejecución de cuatro meses y un presupuesto base de licitación de 361.715 euros (IVA incluido), han precisado desde el Ayuntamiento en un comunicado.

Características de los trabajos

Según explicó el concejal a los vecinos, la actuación en la red de abastecimiento permitirá la sustitución de las conducciones antiguas de fibrocemento que aún quedaban por otras nuevas de fundición dúctil, que asegurarán el suministro.

Estas obras comenzarán en el cruce entre el Pasaje La Unión con la calle la Unión, mejorando su conexión con la tubería existente en la la misma y evitando la intersección de esta conducción en el Pasaje La Unión con otros servicios. Para ello, se dividirá la instalación en dos ramales, uno hacia suroeste y otro al noroeste, por la zona de acerado hasta conectar con la calle Reboul.

Una vez instaladas las conducciones, se renovará todo el pavimento existente sobre ellas. Actualmente algunas zonas están hundidas generando acumulaciones de agua que impiden el paso de los peatones cuando llueve.

Asimismo, se procederá a la reestructuración de las pendientes existentes en esta zona, "lo que favorecerá las condiciones de alivio de las aguas pluviales". Estos cambios implicarán la instalación de una nueva red de absorbedores que recojan el agua superficial y la lleven a los colectores.

También se reordenará la zona de aparcamiento, facilitando el sentido de la circulación y disminuyendo así el riesgo de accidentes en los accesos. Se reservarán dos plazas para aparcamientos de vehículos de personas con discapacidad y el proyecto recoge, además de la demolición de todos los bordillos existentes, la posterior instalación de mobiliario urbano.