Para gustos, coplas

Aunque la copla no es el género preferido del pintor sevillano Juan Saldaña, algunas como 'La lirio', 'Y sin embargo', 'Ojos verdes' o 'La Zarzamora' le inspiraron para elaborar su muestra 'Que se me paren los pulsos', que hoy se ha inaugurado en la Sala Siglo (Plaza del Siglo s/n, primera planta) y que podrá visitarse hasta el 12 de noviembre.

Las historias pasionales, desgarradoras y extremas que cuentan las coplas sirvieron al artista como pretexto para ilustrar "situaciones extremas que parecen que están obsoletas pero que se vuelven a repetir en los tiempos que corren, como el machismo, la violencia de género o la lucha de clases", explica Saldaña. De ahí la doble lectura del título de esta muestra: 'Que se me paren los pulsos' es un fragmento extraído de la copla 'Y sin embargo', de Quintero, León y Quiroja, pero con esta frase el autor también quiere decir "que se me paren los pulsos si vuelvo a ver cosas como estas en los tiempos que corren", pues piensa que "somos casi los mismos, pero vestidos de novedad".

Aunque hay obras basadas en coplas concretas, otras sólo sugieren o hacen como puente de la canción, guardando así una relación, pero sin ceñirse a ella. Es el caso de 'Tatuaje', inspirada en la copla de Rafael León y Manuel Quiroga que Saldaña usa para pintar un cuadro sobre la homosexualidad y el miedo a mostrarla. En el otro lado, como viva imagen de estas canciones, están piezas como 'La Loba' (de Pasión Vega), 'A ciegas' (también de Quintero, León y Quiroga) o 'María de la O' (de Valverde, León y Quiroga), que son interpretaciones de estas coplas por el pintor sevillano.

Sin embargo, Juan Saldaña prefiere que estas obras basadas en retratos (en las que además hay alusiones a la Semana Santa) se entiendan por sí mismas. Me gustaría que la gente se quedase sólo con el cuadro, que vea qué les sugiere, y si les sugiere algo, entonces que escuchen la copla. Arte a priori y a posteriori.