Medicina adapta la forma de enseñar a las exigencias de los nuevos tiempos
La facultad aspira a adelantar las prácticas a los primeros cursos e introduce la tecnología y la participación del alumnado en la metodología docente
JOSÉ MIGUEL RAMÍREZ
MÁLAGA.
Martes, 12 de noviembre 2019, 00:09
La Facultad de Medicina cuenta actualmente con el plan de estudios más largo de la Universidad de Málaga. «Tenemos un programa docente tradicional. Los dos primeros años están dedicados a las áreas básicas, las asignaturas preclínicas, y a partir de tercero comienzan las asignaturas que tienen más prácticas en los centros sanitarios», explica el decano de la Facultad de Medicina, Pablo Lara. Precisamente, en el centro trabajan en la actualidad con la aspiración de modernizar los contenidos y la forma de impartirlos a los alumnos.
La facultad pretende implementar diversas novedades. «El estudiante debería comenzar las prácticas en primero, con los fundamentos del examen médico o de la historia clínica», comenta. Las prácticas clínicas actualmente comienzan en tercero, pero pretenden adelantarlas a los primeros años del grado.
«Además, a los estudiantes que comienzan sus prácticas les hemos impartido por primera vez una sesión informativa sobre la relación del médico con el paciente», declara el decano. En estas breves clases les informan sobre la confidencialidad o el derecho a la intimidad del paciente. En definitiva, los preparan para el contacto con la vida diaria en los centros de salud.
«Los estudiantes deberían empezar las prácticas en primero de carrera con los fundamentos del examen médico», asegura el decano
«Hay que cambiar profundamente el plan de estudios y la metodología docente. Estamos empezando a conversar y trabajar con los profesores de los departamentos», asegura Lara. De esta manera, el decano aboga por una integración de las asignaturas para evitar repetir contenidos teóricos básicos y aburrir al alumnado.
Nuevas metodologías
Un problema al que se enfrenta Medicina es la falta de profesorado. «Hemos hecho un estudio hasta el 2026 y se jubila más del 50%», confirma. Por este motivo, pretenden implementar una medología docente que no sólo facilite la autonomía del estudiante y su capacidad para aprender por sí mismo sino que contribuye a despertar vocaciones docentes para que no todos escojan la salida clínica. «Estamos muy lejos de conseguirlo aún», declara. Además, los alumnos han recibido un curso de formación sobre aprendizaje basado en problemas (una técnica conocida como 'ABP') para estudiar directamente con casos reales. Esto requiere una profunda preparación de los materiales necesarios para propiciar después un debate en el que se expongan las conclusiones.
Otra medida que están introduciendo poco a poco es la técnica de la clase inversa para conseguir una mayor implicación y participación de los estudiantes. «Las clases las imparten los alumnos con el material que se han preparado previamente siguiendo las instrucciones del profesor», explica Pablo Lara. Así, el tiempo de estudio lo invierten en preparar la actividad docente.
También se encuentran inmersos en la creación de una estructura de aprendizaje y servicio. «Debe ser un modo de manifestar el compromiso social de la Facultad de Medicina con su sociedad», declara el decano. Se basa en el aprendizaje de manera que sirva de algún modo a la sociedad. «Acudes a un lugar para hacer algo y luego analizas cómo has hecho tu trabajo», comenta. Este año se han desplazado gracias a este programa un total de 22 estudiantes. «Todos ellos se van a los barrios más pobres de Honduras o Palestina», aclara Lara.
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Casi el 80% de los estudiantes de Medicina están interesados en realizar algunas de estas actividades complementarias, pero alegan falta de tiempo. «¿Por qué no incluirlas dentro del propio plan de estudios?», propone el decano. Ademas, esta facultad sigue apostando por la defensa del Trabajo Final de Grado de los alumnos frente al tribunal, al contrario que otros centros que han decidido suprimir esta exposición pública. «Les facilitamos la presentación en distintas convocatorias, tanto en febrero y marzo, como en junio y julio. Nos supone un esfuerzo extra pero es un formato muy operativo que ayuda a los estudiantes», expone.
Programa informático
El último año del grado los alumnos participan en el rotatorio de clínicas y elaboran el Trabajo Final de Grado. Para llevar a cabo el seguimiento de los estudiantes en las prácticas, se ha puesto en marcha la plataforma 'R0Medicina'. «El programa muestra un escritorio con los 174 estudiantes que hacen el rotatorio, los 1.500 tutores, el tiempo que llevan de prácticas y las competencias que van adquiriendo», detalla el decano. De igual forma, permite la evaluación del tutor por el estudiante y viceversa, así como la emisión de comunicados, lo que facilita la comunicación entre los hospitales y la UMA. «Con este nuevo sistema nos beneficiamos todos. El próximo curso queremos implementarlo en todas las asignaturas del grado que tienen prácticas clínicas», asegura.
Medicina humana
Todas estas modificaciones pretenden humanizar la medicina, según el decano. «En esta facultad queremos enseñarles una medicina centrada en el paciente. Es uno de los aspectos de los que más se habla en la actualidad, de rehumanizar la medicina», agrega Lara. Es necesario dotar de importancia esta relación entre las personas frente a todo el impulso que ha tenido lo tecnológico. «Nos centramos en el estudiante», confiesa.
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