Una familia deja la casa que compró en 2005 al enfermar su hija por las humedades

Olga Melgar y su marido, un matrimonio de Arriate, están desesperados. Se compraron una vivienda en 2005 en dicha localidad que prácticamente, aseguraron, desde el principio sufre desperfectos en la construcción hasta el punto de que su hija se puso enferma debido a las humedades que tiene la casa y se tuvieron que ir de alquiler. Ahora la constructora, Construcciones Hermanos Cintado S. L., les ha comunicado que en diciembre dejará de pagarles el alquiler y que no les cambiará la vivienda que compraron por otra, tal y como les ofreció la empresa.

Nos compramos la casa en 2005, nos casamos en 2006 y desde que estamos aquí viviendo cada año los constructores nos tienen que arreglar fisuras y grietas que van apareciendo. En 2008 nace mi hija y en 2009 mi hija coge una enfermedad, una neumonía bilateral, a causa de las humedades y de los hongos que tenía la casa de la mala edificación. Estuvo ingresada muy grave, de diez a doce días en el hospital, con la sorpresa que nos pregunta el pediatra si vivíamos en una cueva, denunció Olga.

Así, en 2009 se fueron de alquiler a otra vivienda en Arriate y hace dos años los constructores les ofrecieron cambiar la casa por dos apartamentos: La idea era juntarlos e irnos a vivir allí, afirmó la afectada pero en junio el abogado de la constructora les comunicó que en diciembre dejarán de pagarles el alquiler y que tampoco le cambiarán la casa. En diciembre dónde voy. Somos una pareja trabajadora pero pagar un alquiler y una hipoteca hoy en día es complicado, dijo Olga que insistió que desde que se compraron la casa pagan religiosamente su hipoteca de alrededor de 600 euros para una vivienda que les costó entre 160.000 y 170.000 euros.

Nos pidieron que tenían que hacer unas catas para hacer una investigación y solucionar los problemas y nos han destrozado la casa, insistió al enseñar los boquetes que tienen su cocina, patio y habitaciones. No nos cogen el teléfono. Nosotros queremos solucionar esto por las buenas, subrayó mientras añadió que uno de los constructores, que no ha querido hacer declaraciones pese a los intentos reiterados de este periódico, es vecino, pared con pared, con su vivienda. Su casa está perfecta, criticó y finalizó: Nosotros pedimos una solución digna.