La siempreviva en riesgo

El litoral malagueño está lleno de especies desconocidas para la mayor parte de las personas que disfrutan a diario de sus playas. Cuando los bañistas las encuentran, el desconocimiento se traduce en sorpresa y curiosidad, pero también en una amenaza para su conservación. Es el caso del dátil de mar, el cangrejo corredor y una especie vegetal conocida como la 'siempreviva malagueña'. Las tres habitan en los acantilados y se encuentran en peligro de extinción.

El riesgo no está en la contaminación ni en el cambio climático, sino en la propia acción humana. Como una forma más de ocio junto al mar, muchas personas se acercan al rompeolas y recolectan estos animales marinos sin conocer las consecuencias. «Su hábitat es el rebalaje y si se les saca de ahí en un cubo, mueren», explica Juan Jesús Martín, directivo del Aula del Mar de Málaga.

Campaña divulgativa

Para evitar una práctica que durante los meses estivales se ceba con estas y otras especies de la costa malagueña, el Aula del Mar desarrollará una campaña informativa dirigida a la comunidad escolar y, también, a la población en general. Una labor que se pondrá en marcha gracias al convenio firmado ayer con el Área de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Málaga, que aporta 16.490 euros.

«Con esta campaña vamos a aprender que hay cosas que no se deben hacer en la playa», aseguró la concejala de Medio Ambiente, Araceli González. Esta inversión permitirá al Aula del Mar editar 1.500 folletos, 500 carteles y varias guías didácticas sobre la fauna y la flora del rompeolas. Asimismo, se realizarán una veintena de talleres en centros educativos y ciudadanos, así como unas jornadas de concienciación.

Con el asesoramiento del Centro de Cooperación del Mediterráneo de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), este material divulgativo dará a conocer lo importante que es para determinadas especies marinas vivir en los acantilados. Por ejemplo, la siempreviva malagueña necesita el salitre del mar para crecer, de la misma manera que el dátil de mar construye su casa en piedras y rocas.

Esta campaña de sensibilización comenzará en septiembre y se prolongará a lo largo de un año. No obstante, ayer se dio el primer paso con su presentación ante 150 alumnos de los institutos Miguel Romeo Esteo, Sagrada Familia y García Lorca. En el Día Mundial de los Océanos, los estudiantes vieron un documental sobre los efectos del cambio climático y la contaminación, como la acidificación del mar.

Una forma más de acercarse a la gran diversidad de formas de vidas y de paisajes que ofrecen los océanos en general y el Mar de Alborán en particular.