Una despedida en forma

En forma y haciendo gala de buen humor. A pesar de que amaneció con lluvia y una ventolera de cuidado, unos 2.500 malagueños -500 menos de los inscritos- participaron en la VII edición de la Carrera Popular San Silvestre de la Salud. Con gorros de Papá Noel u originales disfraces, pusieron la nota de color a un gris día de los Santos Inocentes.

La prevención de la obesidad fue el lema que centró esta forma de despedir el año con una carrera de cinco kilómetros por el centro de Málaga. «Hay que evitar los efectos de no hacer ejercicio o de llevar una alimentación poco equilibrada», manifestó la delegada provincial de Salud, María Antigua Escalera. «Viene muy bien recordarlo en las fiestas navideñas», añadió el presidente del Colegio de Farmacéuticos de Málaga, Javier Tudela.

«Es una alternativa a la Navidad, para que todo no sea fiesta y excesos en las comidas», afirmó Salvador Lucena, un sanfermín que, junto a los 62 compañeros del Club de Mijas que lo portaban en un trono, se llevó el primer premio al mejor disfraz. «Aunque se ganen algunos kilos en esta época, durante el resto del año la alimentación debe ser sana», apuntó Teresa Medina, otra de las participantes.

Pese a que el sentido de esta carrera es participar más que ganar, la organización quiso recompensar a los corredores con premios en metálico, de entre 150 y 50 euros. El podio femenino estuvo compuesto por Esther Hidalgo, Saloua Benaboud y Tamara Pérez, las tres del Club Nerja. Los ganadores masculinos fueron Daniel Navas, del Club Playa Castellón; Miguel Ángel Torralvo, del Club Málaga Mar; y Charly Mitajar, del Club Nerja.

En el apartado de disfraces, también fueron premiados budas, fichas de dominó, coches de Fórmula 1, toreros, Papá Noel y sus renos, cavernícolas y las hormigas Trancas y Barrancas. Una forma divertida y sana de pasar un día navideño en familia, como hicieron Ana Díaz y su hijo Ignacio, que competían entre sí. «Al final, hemos llegado juntos», dijeron.