Borrar
TANGO. Enrique Utrera, durante una de sus actuaciones. / SUR
TEMPORADA ALTA

Enrique Utrera, coreógrafo y bailarín: Veranos con mucho ritmo

Participo en espectáculos en hoteles de la Costa del Sol / Muchos turistas me piden clases particulares / En mi tiempo libre, prefiero hacer cualquier cosa a bailar.

UNA CRÓNICA DE

Jueves, 17 de julio 2008, 03:49

«SI alguien de riesgos laborales se diera una vuelta por los hoteles donde nosotros actuamos se echaría las manos a la cabeza», bromea Enrique Utrera, de 43 años, director de la compañía Fusión Sur, en la que también es coreógrafo y bailarín. En el verano comienza la temporada fuerte para los espectáculos en los hoteles de la Costa del Sol. Sin embargo, Enrique cree que el baile no está suficientemente valorado y las condiciones que se le ofrecen al artista no siempre son las más adecuadas para el desarrollo del espectáculo.

«En una ocasión, al comentar que el suelo resbalaba, nos dijeron que nos pusiéramos calcetines», comenta como ejemplo. Son en estas circunstancias cuando partes complicadas de la coreografía, como las piruetas con bailarinas, se suspenden. No obstante, para él lo más gratificante es acabar la exhibición diciendo su nombre y escuchando un aplauso.

Son muchos los turistas, de todas las edades y procedencias, a los que los espectáculos de flamenco -el más demandado- tango o baile latino han cautivado. Algunos, tras ver la actuación, no han dudado en pedirle clases particulares en las que invertir el tiempo ocioso de las vacaciones. Otros ni siquiera han esperado al día siguiente y han participado en la propia exhibición. «A veces, hemos tenido que introducir a clientes en el número porque se cruzaban por la pista», cuenta.

Trabajo y talento

Las cuatro horas diarias de ensayo ejemplifican su pensamiento: «En el baile, el 90% es esfuerzo y trabajo, luego hay un 10% de algo que se puede llamar talento o tener un arte en el escenario». Aparte, se encarga de la gestión comercial de la compañía y de otros entresijos, como controlar el diseño del vestuario. «La imagen es primordial».

Durante el año compagina la compañía con clases a aficionados de tango, latino y jazz, su especialidad. «Desde hace años, cuando empezó la moda de los bailes de pareja, hay una explosión de gente interesada en bailar, yo los animo porque creo que es una terapia total», comenta. Enrique ha apreciado un aumento de la edad media en estos grupos, en muchas ocasiones recomendado por los médicos, por ser «un ejercicio de bajo impacto».

Entre estos aficionados tardíos, muchos presentan buenas cualidades, según afirma. «Se podían haber dedicado al baile, además lo saben y hay quien me dice: 'yo en mis días sé que me hubiera podido dedicar', pero por circunstancias su vida ha ido por otro lado», relata.

Aunque prefiere hacer cualquier otra cosa a bailar en sus momentos de ocio, para él es evidente que esta práctica ha cambiado las relaciones de pareja. «En los locales de copas, la relación y la comunicación es directa, espontánea y divertida. Te estás relacionando de una manera muy sana y no hay esa cortedad porque con contacto físico se da un paso más en la comunicación».

Dejó su Jaén natal para vivir en diferentes ciudades españolas y europeas, aunque ahora su domicilio habitual está en Málaga. No recuerda tener unas vacaciones desde hace años, pero no se queja. «No creo que haya un artista que proteste por ello, el hecho de tener trabajo es suficiente», expone.

Tanto es así que no para ni un momento: cuando se encuentra en épocas de montaje se dedica a buscar inspiración durante todo el día, de forma paralela a lo que esté haciendo. «Muchas veces paseo por Pedregalejo. Hay una temporada que estoy pensando continuamente que hacer, estoy abierto a ver si se me ocurre alguna idea. Cualquier detalle puede servir como base para un número o muchas veces una música te inspira la coreografía».

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

diariosur Enrique Utrera, coreógrafo y bailarín: Veranos con mucho ritmo

Enrique Utrera, coreógrafo y bailarín: Veranos con mucho ritmo