Hallan en Córdoba el cadáver de un sacerdote de 75 años con signos de violencia

La aparición del cuerpo sin vida y con evidentes signos de violencia del párroco de la localidad de Villafranca de Córdoba, Tomás Pérez Escudero, de 75 años, causó ayer la consternación entre los habitantes de esta localidad en la que había trabajado durante más de 30 años. El cadáver del sacerdote fue hallado en su propio domicilio, en la calle Alcolea del municipio, en torno a las 10.30 horas, cuando un vecino que le ayudaba a realizar las tareas domésticas acudió, como cada mañana, a casa del párroco.

La Policía Judicial de la Guardia Civil se ha hecho cargo de la investigación de este suceso e intenta localizar a aquellas personas que en los últimos días hubieran tenido alguna relación con el sacerdote. Fuentes de la investigación indicaron que, aunque aún no se ha detenido a nadie por estos hechos, los primeros indicios apuntan a que el móvil del homicidio no estaría relacionado con un robo, ya que la vivienda no parecía desordenada.

Investigación

No obstante, tras las primeras diligencias, también se baraja que el hombre falleciera por los golpes recibidos con un radiador que también se encontró en el domicilio donde apareció el cadáver del párroco.

Natural de la localidad cordobesa de Hinojosa del Duque, el sacerdote llevaba trabajando más de 30 años en Villafranca, donde se encargaba de las cuatro iglesias, una dedicación por la que el Ayuntamiento le concedió el título de Hijo Predilecto de la ciudad el pasado año.

Uno de los vecinos de la calle, José Ayllón, manifestó a Efe que el fallecido celebró en la tarde del domingo una misa en la parroquia de Santa Marina de Aguas Santas de la localidad.

Esta versión fue corroborada por el hermano mayor de la Cofradía de San Isidro de Villafranca y amigo personal del fallecido, Francisco Torres Vázquez, quien aseguró a los periodistas que el párroco dio el domingo dos misas, la última a las 20.30 horas; que también fue visto paseando por las calles del municipio y que antes había almorzado con el coro de la parroquia.