Pacientes de Carlos Haya esperan hasta mil días para ser operados

Las cosas de palacio van despacio. Y algunas operaciones también. El Hospital Carlos Haya tiene en lista de espera a pacientes que llevan hasta mil días aguardando ser operados. Si bien es cierto que esos casi tres años de demora no se corresponden con una patología incluida en los decretos que fijan un tope de 120 o 180 días para ser intervenido, no lo es menos que es un plazo demasiado largo para que haya argumentos que lo justifique, dijeron a este periódico fuentes hospitalarias consultadas. Los malagueños son los andaluces que sufren una demora media mayor para una intervención.

Detrás de esos retrasos en dar una solución quirúrgica a los pacientes está la falta de profesionales de algunos servicios, lo que provoca que el personal no de abasto para sacar adelante el trabajo en un periodo razonable. Las fuentes citadas se refirieron al servicio de neurocirugía, que acumula unos plazos de espera elevados (algunos casos llegan a los mil días). También sufren problemas los servicio de traumatología y cirugía general, ya que la presión asistencial que soportan es muy fuerte.

El resultado es que los meses van pasando y los enfermos continúan aguardando la llamada de Carlos Haya. Este periódico ha comprobado que hay pacientes que llevan ya mil días en lista de espera (dos años y nueve meses), mientras que otros soportan demoras de 880 días, 854, 796, o 772 días. En todos esos casos, los retrasos en pasar por un quirófano superan los dos años. Algunos de esos enfermos ni siquiera han sido llamados para ser vistos por el servicio de anestesiología, paso previo para poder ser intervenidos quirúrgicamente. En otras ocasiones, como el usuario no es operado, vence el plazo de vigencia de las pruebas de anestesia y hay que repetirlas, con las consiguientes molestias para el ciudadano y el coste económico para Carlos Haya.

La Consejería de Salud y el SAS solo ofrecen datos del estado de las listas de espera una vez año. Y cuando lo hacen se centran en las patologías sujetas a los decretos de 120 y 180 días, pero sin especificar los tiempos máximos que aguardan los enfermos con dolencias que no están incluidas en esos decretos. Al finalizar 2011 había 12.078 pacientes inscritos en la lista de espera quirúrgica de Málaga. La demora media era de 60 días, tres por encima de la andaluza, situada en 57.

No se da una solución

Como los hospitales tratan por todos los medios de cumplir con los decretos, se da prioridad a ese tipo de enfermos, circunstancia que va en detrimento del resto de pacientes, que ven cómo los meses van discurriendo sin que les llegue una solución quirúrgica a su dolencia.

«La situación no es peor gracias al gran trabajo que hacen los profesionales, que dan todos los días el do de pecho. No se les puede pedir más», afirmó el secretario provincial de Sanidad de UGT, Juan Miguel Contioso. El sindicalista subrayó que «no se debe permitir ni un recorte más en sanidad», porque eso iría en perjuicio de la calidad asistencial. «Los gestores sanitarios tienen que hacer una buena gestión y, si no son capaces, que dejen su puesto», precisó Contioso. A su juicio, las medidas de ajuste que están aplicando el Gobierno central, la Consejería de Salud y el SAS originan que la situación de la sanidad pública haya dado un paso atrás muy grande hasta situarse en una situación similar a la que había hace 35 años.