Las constructoras malagueñas se dejan seducir por el mercado exterior

Las empresas malagueñas de la construcción han visto en el extranjero una buena salida a la falta de negocio en España. América Latina,Centroeuropa o los países del Magreb o de Oriente Medio son los destinos preferidos para los empresarios más valientes, que han apostado por una tendencia que también se impone en territorio nacional.

Sumando las cifras de negocio de las principales constructoras españolas, el año pasado las obras en otros países alcanzaron el 84% del total de su facturación.

«Es cierto que los años anteriores han sido muy duros para el sector de la construcción y algunas empresas de nuestra provincia han apostado por buscar negocio con administraciones públicas de otros países. Siempre me ha parecido algo muy positivo y lo sigo recomendando, siempre que la empresa tenga suficiente capacidad económico-financiera y, sobre todo, cuente con un debido asesoramiento jurídico por parte de abogados especialistas en la materia. Es imprescindible que la empresa busque no sólo el negocio, que es lógico, sino también la seguridad jurídica en cualquiera de sus actuaciones fuera de nuestras fronteras», reflexiona Pedro Javier López, director de Consultores de Contratación Pública.

Varios son los ejemplos de firmas locales que se han dejado seducir por los cantos de sirena que les llegaban desde otros países. Una de las primeras en dar el salto fue Sando, que desde 2005 mantiene una estructura estable en el exterior. Polonia fue el primer país en el que iniciaron su actividad y posteriormente extendieron también sus redes a Colombia y Marruecos.

La compañía prefiere no desvelar las cifras de negocio en el último año, pero a principios de 2013 tenía en cartera proyectos por valor de más de 56 millones de euros.Entre ellos, destacaban la ejecución de infraestructuras viarias en Polonia, un paso subterráneo en la ciudad marroquí de Casablanca y una compleja carretera en Colombia valorada en más de 30 millones de euros.

Fuera de la división de obras, el último contrato con el que se hizo la compañía a través de su filial Althenia, anunciado este mismo verano, fue el servicio de limpieza viaria y recogida de residuos de una parte de la ciudad de Tánger. La duración era de siete años y el presupuesto total de 45,35 millones de euros. Fuentes de Sando lo calificaron como un «importante logro», al tratarse de un servicio a largo plazo en una actividad y en un mercado «estratégicos».

Más exóticos son los destinos que ha elegido la también malagueña Ielco para diversificar su actividad. Desde hace un par de años, la empresa que dirigen Emilio y Ana López cuenta con una filial en Qatar, donde ha llegado a alcanzar una facturación de hasta seis millones al año gracias a contratos en obra civil y residencial.

Los propietarios ha comparado la situación actual de ese país de Oriente Medio en lo que a la construcción se refiere con la de la España de los años 60 y 70: «Hay mucho por edificar, pero también mucha competencia». Ielco reconoce que tienen en mente aspirar a algunas de las muchas actuaciones que se plantean en el país de cara a la celebración del Mundial de Fútbol en 2022, aunque se antoja un reto difícil debido a la presencia de numerosos competidores.

Mercados estratégicos

Según Extenda, Qatar es la economía con mayor crecimiento económico del Golfo pérsico, con un 6,2% en 2012, un 5% en 2013 y una previsión de otro 5% en 2014. En el caso de Guamar, la firma estableció el año pasado una delegación en Lima, la capital de Perú, donde ha pugnado por varias obras públicas de entre 5 y 11 millones de euros. El objetivo de la empresa es afianzar pronto su presencia en ese destino como mercado estratégico, debido a los planes del Gobierno peruano para invertir en infraestructuras y servicios y sacar adelante a un país muy atrasado con respecto a otros de Latinoamérica.

El estudio de arquitectura de José Seguí es otra de las sociedades malagueñas que ha apostado por Perú. Guamar, que espera cerrar 2014 con una facturación de 15 millones de euros, busca también el capital extranjero incluso dentro de la provincia, como sucedió este mismo año tras hacerse con el contrato para construir en Churriana la sede de la multinacional danesa del sector textil Bestseller.

A principios de año, el GrupoVera también se hizo con dos importantes concursos en Colombia: el de reparación y mantenimiento de viales en la localidad de Rafael Uribe, en el entorno de Bogotá, con presupuesto de 5,7 millones de euros; y la construcción de un edifico público para la Alcaldía de Pitalito, en el departamento de Huila, por 2,3 millones de euros. Tiempo atrás, la compañía ya se había hecho con varias adjudicaciones en ese país por valor de más de 30 millones de euros.