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POR JUBILACIÓN. Fernando Mejía se retira tras una vida entera en La Cosmopolita. / EDUARDO NIETO
La Cosmopolita sirve el último café
MÁLAGA

La Cosmopolita sirve el último café

Muchos de sus clientes se toparon ayer con la persiana bajada. La noticia corrió de boca en boca por toda la calle Larios. El dueño de la céntrica cafetería echa el cierre después de 60 años

DANIEL MOLINA

Miércoles, 23 de julio 2008, 10:19

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Fue la comidilla de toda la calle Larios. La jornada empezaba con la noticia de que la tradicional cafetería La Cosmopolita echaba el cierre, tras abrir sus puertas en el año 1948 en la céntrica vía malagueña.

Aunque muchos confiesan que era algo que se venía comentando a lo largo de las últimas semanas, a todo el mundo le pilló por sorpresa un adiós tan repentino. Y es que al parecer, el propietario comunicó la misma mañana a sus trabajadores que se trataba del día en que La Cosmopolita servía su último café.

Dicho y hecho. Poco después de las dos de la tarde se daba carpetazo a más de 60 años de historia, desde que el padre de Fernando Mejía se aventurara a poner un negocio para salir de la difícil situación por la que atravesaban muchos malagueños de la época.

Con 71 años, Mejía ha decidido que era el momento idóneo para jubilarse y explicó a sus empleados, según testigos presenciales, que «estaba cansado después de tantos años al frente de la cafetería y ahora le tocaba a él descansar también».

Por sorpresa

«Era algo que se esperaba», comentaban los trabajadores de los locales vecinos. «Se venía rumoreando desde hace dos meses pero nadie se esperaba que fuera de una forma tan repentina», declaró Salvador Vargas, un vendedor de lotería que frecuentaba la céntrica cafetería desde hace más de quince años.

Según Vargas la noticia cayó como un jarro de agua fría para los empleados del negocio. «Se han enterado hoy mismo. Estaban hechos polvo, ha sido todo muy de repente y a nadie le ha dado tiempo a asimilarlo», puntuó.

Al presidente de la Asociación de Empresarios de Hostelería de Málaga (Aehma), Rafael Prado, esta noticia también le cogió por sorpresa, al igual que al resto y la recibió con tristeza, «ya que se pierde uno de los pocos negocios tradicionales que quedan en la ciudad». Aunque Prado desconoce el futuro del local, y no sabe si se continuará con la costumbre hostelera, apuesta por que si así fuera, los nuevos propietarios mantengan el nombre para «que no se pierda parte de la historia malagueña».

Con el cierre de la mítica cafetería se dice adiós a uno de los pocos negocios familiares que han conseguido mantenerse frente a las grandes cadenas de tiendas y franquicias que durante los últimos años se han ido apoderando de la calle Larios, y es que junto a la Farmacia Pérez de Guzmán y la heladería Casa Mira, La Cosmopolita era uno de los negocios con mayor tradición e historia de la céntrica vía.

Durante la tarde de ayer todo eran especulaciones, y aunque nadie sabía a ciencia cierta el futuro que le esperaba al local, algunos se aventuraban a pronosticar que iba a ser la nueva sede de una cadena de tiendas de ropa infantil, al tiempo que otros afirmaban que iba a continuar siendo una cafetería. Mientras tanto, habrá que esperar a las próximas semanas para conocer el nuevo rumbo que tomará la esquinita de la calle Larios.

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