Al ritmo de la solidaridad

«Voy a hacer un recorrido por la música de la feria de Marbella en sus distintas ubicaciones por las que ha pasado». La presentación de Francis Guzmán, propietario del bar La Polaca, a su sesión retro hacía presagiar buenos momentos de nostalgia. El primero en sonar, Julio Iglesias. Le siguieron Donna Hightower, Chanais y así hasta una veintena de temas con muchas décadas de vida que hicieron disfrutar al numerosos público que abarrotó el local en un evento muy especial. Seis profesionales de distintos ámbitos laborales, pero muy conocidos en la ciudad, quisieron colaborar en un acto impulsado por la delegación de Juventud del Ayuntamiento de Marbella a beneficio de la Asociación Crece que atiende a niños con discapacidad.

«He hecho una selección de los temas que escuchaba cuando salía por el Puerto Deportivo». El chef Dani García hizo patria y demostró que domina la cabina de música casi tan bien como los fogones. En su selección de temas: Mecano, Alaska, Hombres G, Danza Invisible o La Leshe que Mamate (grupo local). «Ojalá siempre estuviera en Marbella para poder participar en eventos como este», señaló el improvisado DJ, o «pinchaó», como presentó a los participantes el periodista de Onda Cero José Luis Salas que hizo de maestro de ceremonias.

El director de Deportes del Ayuntamiento, Federico Vallés, el empresario sampedreño Raúl Sánchez, el humorista Ángel Rielo, el locutor de RTV Marbella, Jesús Jaén, y el abogado Juan Luis Gámez, demostraron sus dotes como pinchadiscos en un evento al que ya se piensa en dar continuidad. «La idea es que se puedan organizar hasta cuatro al año. Siempre a favor de distintas organizaciones sociales de la ciudad y siempre en bares distintos», explicó Gámez. El abogado confeccionó una lista de temas compuesta por «éxitos internacionales de los 80 y dos perlitas: El Baúl de los Recuerdos de Karina, y Waterloo, de ABBA».

Los asistentes al 'DJ Retro. Pinchando por una buena causa' tuvieron la oportunidad de poner su granito de arena en el trabajo que desde hace 11 años desarrolla en la ciudad con los niños discapacitados la Asociación Crece. Al precio de 5 euros se pusieron a la venta peluches solidarios. La presidenta del colectivo, Mariluz Martínez, aplaudió la iniciativa «que viene a respaldar la labor de formación y atención a estos niños que venimos haciendo con muy pocas ayudas».