Hamburguesas con salsa y una pizca de conversación

«Esto es una exclusiva mundial. No me gusta cocinar en público y es la primera vez que lo hago delante de tanta gente». Con estas palabras, que desataron las carcajadas de los asistentes, comenzó ayer por la tarde el conocido bloguero culinario, Mikel López Iturriaga, a cocinar el menú que traía preparado para presentarlo dentro del ciclo 'Cocinando en La Térmica', dirigido por el responsable de la web www.guiagastronomicacds.com, Lutz Petry, y que comenzó el pasado mes de abril.

Petry, tal como hizo en las pasadas ocasiones, entrevistó de manera informal a uno de los personajes gastronómicos más relevantes del momento, mientras éste cocinaba dos platos que abrieron el apetito de una sala que se llenó, casi en su totalidad, para disfrutar del 'show-cooking', que es como los responsables han llamado a este espectáculo. Como justificándose, Iturriaga avisó de que era un menú «casi vegetariano», aunque sí que aclaró que come carne y pescado, pero que intenta que sea en las menos ocasiones posibles. «Uno de los ingredientes que más trato de usar -desveló- son las legumbres». De hecho, el plato principal cocinado ayer no fue otro que hamburguesas de lentejas y garbanzos, acompañado de una ensalada de escarola que aderezó con «una salsa típicamente catalana».

Roto el hielo del principio, el micrófono no dejó de pasar de mano en mano para que el público fuera preguntando, no solo aspectos concretos de la receta, sino del trabajo que realiza para los distintos medios de comunicación. No en vano, el blog de Iturriaga -'El Comidista'- ha sido nombrado este año como uno de los cuatro más influyentes del momento, y sus apreciaciones culinarias así como sus recetas no paran de triunfar en las redes sociales. Sus artículos se han llegado a publicar en las revistas Rolling Stone o Marie Claire. Entre el olor que desprendía la cebolla frita, sumado a que se acercaba la hora de cenar, la dinámica pasó a ser como la de una cocina de cualquier casa, en la que el resto de miembros de la familia esperan con ansia para ver un plato terminado, aunque en esta ocasión no sería para comerlo, ya que no hubo suficiente para las más de cien personas que se acercaron ayer al edificio de La Térmica.

Entre críticas a la nata -que considera sobrevalorada- y alabanzas al aceite de girasol -«no soy un talibán del de oliva», aseguró- fue pasando la velada, mientras el comentario de la gente al salir no era otro que admitir el error de «no haber cenado antes de venir a charlar, y sobre todo a oler», los manjares que Mikel López Iturriaga compartió con los malagueños: unas ricas hamburguesas con una pizca de conversación.