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HÉCTOR BARBOTTA
Lunes, 20 de febrero 2012, 08:43
Un momento de desatención tuvo un resultado trágico. Los padres de un niño de tres años han presentado una denuncia contra la maestra de su hijo tras un episodio en el que el menor resultó herido de gravedad en un ojo al ser alcanzado por unas tijeras lanzadas por un compañero de la clase. El niño ha sufrido heridas graves y corre grave riesgo de perder la visión en el órgano afectado.
Según la denuncia -presentada el pasado 30 de enero por el despacho Martínez-Echeverría (que ha asumido la representación de los padres), y que se dirige también contra la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía como responsable civil subsidiario- en el momento del incidente la maestra se había ausentado de la clase.
Los hechos tuvieron lugar en un colegio público de Marbella el pasado 22 de diciembre, día en que se celebraba el sorteo de Navidad.
Esa mañana, en el aula de Educación Infantil para niños de tres años se había organizado una actividad de manualidades, por lo que a primera hora se colocó en una mesa junto a la que se sentaron los alumnos el material necesario, que incluía cartulinas, pegamentos y también tijeras.
La denuncia, a la que ha tenido acceso este periódico, sostiene que en dos ocasiones la maestra denunciada se ausentó del aula para acercarse a una contigua, la de los niños de cuatro años, y comentar con sus compañeras los pormenores del sorteo. Se basa para ello en el testimonio de tres madres de alumnos de dicha clase que esa mañana habían acudido para colaborar en actividades y se encontraban en el lugar . Estas mujeres han declarado haber visto a la maestra denunciada entrar en el aula y permanecer en la misma durante dos lapsos de tiempo . Cinco minutos en la primera ocasión y diez minutos, la segunda.
Esta declaración es contradictoria con un informe emitido por el colegio, que aseguraba que la profesora se encontró en todo momento en su aula y no se desplazó a otra.
Según la denuncia, fue en uno de esos momentos de supuesta ausencia de la profesora, en los que habría estado comentando con sus compañeras que su décimo había resultado premiado con una terminación, cuando uno de los alumnos arrojó unas tijeras que impactaron en el ojo derecho del hijo de los denunciantes, «encontrándose ambos sin vigilancia y con fácil acceso a tal material peligroso que le había sido repartido con anterioridad». El escrito sitúa el momento del suceso entre las diez y las diez y diez de la mañana, momentos después de que se cantara el 'Gordo' .
Centro de salud
Los padres del niño fueron avisados inmediatamente para que se trasladaran al centro de salud de Leganitos, al que llegó minutos después la profesora con el menor, que fue derivado inmediatamente al Hospital Costa del Sol, posteriormente al Hospital Materno Infantil de Málaga y finalmente al Hospital Civil, donde fue intervenido quirúrgicamente.
El niño presenta una herida perforante que afecta al iris, el ángulo y la esfera temporal. Sufre subluxación de cristalino y catarata. Es precisamente esta última lesión la que impide de momento conocer el alcance que tendrá sobre la visión del ojo afectado, pero en el mejor de los casos no podrá ser sometido a un trasplante de córnea hasta que tenga 18 años, por lo que el ojo le quedará inutilizado al menos hasta ese momento. El menor se encuentra también bajo tratamiento psicológico.
En opinión de los denunciantes, la profesora ha incurrido en un delito de lesiones causadas por imprudencia grave.
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