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J. M. C.
Lunes, 21 de junio 2010, 03:39
Increíbles fueron algunos de los episodios primigenios de una carrera que concentra en su formación inicial cuarenta mecánicas propulsadas por idénticos corazones clonados. Forzó el frotamiento de ojos reconocer a Fonsi Nieto como líder de la carrera en la segunda vuelta. Llamó la atención comprobar que Corti se sabía ungido. El piloto de Como, autor de la 'pole', quería anticiparse su regalo de cumpleaños sin esperar al próximo viernes. Rodó siempre entre los mejores mientras el interminable grupo cabecero iba lentamente perdiendo unidades hasta reducirse ahora a un trío, luego a un quinteto.
El italiano no está habituado a estas galas y se fue al suelo. Sin Corti, Luthi aprovechó la tesitura para dar el golpe de gracia, pero también pifió y se benefició quien menos se esperaba, un Cluzet al que se le despejó el asfalto como ante Moisés se abrieron las aguas del Mar Rojo. Simón no encontró huecos y selló el vale por el tercer puesto, mientras que Elías, tras pasar media carrera fuera de los puntos, apretó para concluir décimo, puesto que le habilita para renegociar su liderato.
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