Secciones
Servicios
Destacamos
PILAR MARTÍNEZ
Domingo, 21 de febrero 2010, 03:58
Pacto, comisiones pro acuerdos y llamamientos a un consenso que urge por el bien de todos, del país, del Gobierno y de la oposición. Estos mensajes han marcado una semana en la que precisamente el sector turístico malagueño es ejemplo de que los colores políticos pueden desteñirse para tornarse en uno solo cuando se trata de trabajar por la única industria que tira del carro de la economía. En estas lides el consenso en defensa del turismo es tan normal que ha dejado de ser noticia, pero no por ello es una actitud de la que otros destinos, sectores y ámbitos gubernamentales podían tomar buena nota. Es tan simple como poner el sentido común a disposición de una actividad de la que viven tantas familias por las que en ocasiones hay que tragar sapos y culebras, pero manteniendo el tipo. En definitiva, así es la vida.
La iniciativa 'MálagaCon', en la que la Consejería de Turismo, el Patronato, el Ayuntamiento de Málaga, la Cámara de Comercio y, desde esta semana, la Universidad olvidan sus siglas o tendencias políticas para conquistar juntos y para la ciudad congresos y eventos. Otra muestra de este saber estar a la altura de las circunstancias ha sido la cumbre de cruceros que se ha celebrado en el Puerto y en el que también caminan juntos no sólo administraciones públicas de distintos bandos sino también importantes empresas y entidades financieras. No está el horno para andar peleando por colgarse medallas. La temperatura es la adecuada para pensar en ser sensatos y construir futuro. Y en eso, aquí el turismo lleva la delantera.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.