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ANTONIO ROCHE alroche@diariosur.es
Viernes, 5 de febrero 2010, 11:54
La crisis se ha cobrado una víctima más en Málaga: el restaurante Doña Pepa, ubicado en la calle Vélez-Málaga, en el corazón del barrio de La Malagueta. El cierre se produjo el pasado 30 de enero, aunque el día anterior, viernes, no abrió sus puertas por el fallecimiento de quien era propietario del local -no del restaurante- Francisco Repiso Martos. El director propietario de Doña Pepa, Francisco Regueira Colominas, encontró el momento oportuno para decir adiós a una etapa de su vida, marcada hasta ese momento por su fuerte implicación en la vida social malagueña en su doble faceta de restaurador y cofrade -fue hermano mayor del Sagrado Descendimiento-. De hecho, a uno de los salones lo bautizó con el nombre de 'Agrupación de Cofradías', donde cofrades de distintas hermandades se reunían en animadas y prolongadas tertulias.
Doña Pepa ha sido un referente en los últimos quince años en Málaga. Regueira montó este establecimiento después de un largo periodo de trabajo en Antonio Martín. Su capacidad para las relaciones públicas fue fecunda para el restaurante, que rápidamente se hizo de una clientela selecta. Políticos, empresarios, cofrades, periodistas, gente de la cultura, toreros y artistas comenzaron a poblar sus mesas.
Por allí han pasado la duquesa de Alba, las ex ministras Celia Villalobos, Magdalena Álvarez y Carmen Calvo, el anterior presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves; el que fuera alcalde de Madrid José María Álvarez del Manzano, el nuevo director del CNI, el general Félix Sanz Roldán, cuando era el jefe del Estado Mayor de la Defensa; Christine Ruiz Picasso, el actor Antonio Banderas, el barítono Carlos Álvarez, los toreros Enrique Ponce, Francisco y Cayetano Rivera Ordóñez, Javier Conde, Finito de Córdoba, Jesulín de Ubrique, la cantante María José Santiago, los periodistas Luis del Olmo y Alejo García...
Entre sus paredes se han tomado decisiones políticas interesantes y se han cerrado acuerdos empresariales brillantes. El actual consejero de Turismo, Luciano Alonso, era uno de los asiduos. Allí se han celebrado bodas, bautizos, comuniones y homenajes. Eran muy concurridos los premios taurinos que concedía junto a Fernando Joyeros. Todo ha pasado a mejor vida.
Cierra también sus puertas, pero de forma temporal, el restaurante Antonio Martín para someterse a una profunda reforma. Mientras tanto, la empresa se ha acogido a un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) pactado con los trabajadores -pasan mientras tanto al desempleo- y sindicatos. Este emblemático establecimiento, que está regentado por el empresario José Luis Martín Lorca, abrirá de nuevo sus puertas el próximo 30 de abril totalmente remozado y dispuesto a iniciar una nueva vida en un enclave espectacular.
En este sector de la ciudad desapareció un restaurante que daba muy bien de comer, 7 de Julio. La muerte de su propietario privó a los clientes de degustar una excelente cocina vasco-navarra.
También cerró La Malagueta, un local situado junto a La Ménsula. En el mismo lugar se ha establecido Hermanos Gutiérrez. El traslado del Palacio de Justicia a Teatinos ha dejado 'tocados' a muchos establecimientos de hostelería de esta zona. Sin embargo pervive, que no es poco en estos tiempos, La Querencia, un entrañable bar que lleva personalmente Antonio Díaz Campián. Su excelente jamón, los montaditos y una manzanilla de barril son aval suficiente para mantener la fidelidad de la clientela, entre la que se encuentra el ex presidente del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, Manuel Rodríguez López, y el cirujano Horacio Oliva, médico del torero José Tomás.
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