Usuarios lamentan la suspensión de actividades deportivas en la UMA a los no universitarios

Los usuarios han conocido la decisión de la UMA de forma presencial, cuando han acudido al servicio de Deportes a renovar sus credenciales, y a través de mensajes de móvil.

Miguel Heredia, uno de estos usuarios, explica que llevan unos diez años realizando Entrenamiento Funcional, o 'Functional Training', una de las actividades afectadas. «De repente restringen completamente el acceso a ellas si no eres miembro de la UMA», lamenta.

Otro usuario, tras 15 años practicando deporte en la UMA, dice sentirse apenado por ver cómo «se penaliza la fidelidad, cómo se pierden los valores del deporte, cómo esa familia UMA que se ha generado año tras año la quieren quebrar. Durante la pandemia hemos estado ahí cuando la comunidad universitaria estaba en casa, hemos mantenido vivo el pabellón. Se ha hecho un bien para las personas mayores con el deporte durante todos estos años, y a los más pequeños, se le ha inculcado los valores de respeto, tolerancia, trabajo en equipo,... y todo esto a partir del curso 2022/23 ya no se tendrá». Belén Hernández, con su hijo practicando judo, lamentaba también que «de un día para otro» y a través de un sms se hayan enterado de que no podrá seguir acudiendo a las instalaciones del campus de Teatinos.

En el catálogo de actividades para el curso 2022/23 publicado en la web de la UMA aparecen muchas de las actividades 'solo para la comunidad universitaria' y en otras se indica expresamente 'nuevas inscripciones solo para comunidad universitaria'.

El vicerrector de Estudiantes y Deportes, José Francisco Murillo, ha explicado que se trata de un «reajuste» de la «extensa» oferta deportiva de la UMA, pero que hay otras muchas actividades que se mantienen abiertas a no universitarios, como las escuelas de atletismo, pádel, natación o fútbol sala, entre otras.

Según el vicerrector, durante los dos últimos cursos académicos se han desplegado una serie de medidas con el propósito de incrementar la participación del alumnado en la actividad física y deportiva: gratuidad de la tarjeta deportiva, disminución de los precios, tarifa plana para quien desea participar en más de una actividad, gratuidad para el estudiantado con más bajos niveles de renta familiar. «Todo ello nos ha permitido incrementar el número de estudiantes que hacen uso de nuestras instalaciones deportivas con cierta regularidad, pasando en este tiempo de 200 estudiantes usuarios a más de 2.000», asegura.

Por otro lado, este próximo curso comienza a impartirse la nueva titulación del grado en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte, lo que exige «un importante incremento de recursos materiales y de espacios dedicados al desarrollo de esta nueva titulación», aclara Murillo Mas.

No obstante, el vicerrector asegura que la Universidad de Málaga «sigue comprometida con la responsabilidad social que asume como institución pública», pero que «debe priorizar la actividad que desarrolla en función del sentido de su propia existencia, que no es otro que el de la formación integral de su estudiantado. La universidad no puede asumir las funciones, relacionada con la actividad física y de la salud de la ciudadanía, que corresponden a otras instituciones», puntualiza.