First Dates

Me hallo en Madrid, en la cama del hijo de mi kiosquero favorito de Campanillas. Lo conocí hace once años (al hijo). Tuvimos una primera cita en mi casa (el que fue mi piso de soltera durante ocho años en el barrio de La Trinidad). Él iba a hacer una obra de teatro y tenía que interpretar a un fotógrafo, me citó porque quería documentarse para el papel. Conservo una foto que le hice en aquella primera cita, lo que no conservo es una nota que me mandó al llegar a su casa. Fue una nota de amor, decía algo así como que llevaba mucho tiempo admirándome y... Bueno, la verdad es que no tengo ni idea de lo que decía la nota, pero era muy bonita. Allí comenzó nuestra historia de amistad romántica. Aunque con los años, la confianza ha conseguido que cuando nos veamos después de mucho tiempo yo le pregunte si se ha echado un tinte porque le veo el pelo raro y él me diga que me ponga corrector de ojeras porque se me notan las cinco horas de viaje. En medio de todo esto hemos tenido numerosos encuentros íntimos y hemos fantaseado al punto de pensar en cómo serían nuestros hijos. Abro su armario y está lleno de camisas que ha heredado mías. Miro a la derecha y veo mi cara dos veces en su pared. También la cara de José Andrés padre y Paqui cuando eran muy jóvenes. Me siento bien aquí. Le acabo de mandar un WhatsApp para quedar con él para comer, devolverle las llaves de su piso y decirle que estoy escribiendo en su cama. Me responde: «No me gastes las palabras de mi cama que necesitaré esta semana algunas». Él sí que es un escritor romántico.

Me gustaría ver a todas las personas que conozco pasar por el restaurante de 'First Dates', me gustaría poder disfrutar de ese espectáculo íntimo y caprichoso. Veros en esa tesitura incómoda y divertida a partes iguales. Siempre que veo el programa con mi pareja le digo un montón de personas a las que me gustaría ver allí sentadas. Ver cómo Carlos Sobera, le quita el abrigo a mi suegro, por ejemplo. En mi imaginación ya ha pasado. Es así como funciona el divertimento para mí, en parte está mirar lo que está pasando, pero os voy sentando una por una, uno por uno e imaginando vuestras reacciones.