Kresala, esencia y tradición vasca

Kresala, que en euskera quiere decir 'salitre', se centra en los productos que a diario llegan desde las lonjas de Hondarribia y las mediterráneas de Roses y la Barceloneta. En esta casa la langosta y el bogavante gozan de muchos adeptos, en especial hechos a la parrilla, aunque tampoco podemos dejar de probar el rodaballo y la corvina. Antes de meternos entre pecho y espalda alguno de estos crustáceos, los chipirones de anzuelo y las alcachofas con berberechos son unos magníficos entrantes.

En Kresala disponen de un menú degustación, aunque aquí lo que prima es el pescado o marisco hecho en una enorme parrilla que nos va a sorprender por su tamaño. La sala, con grandes vistas sobre el mar y la ciudad, junto a la carta de vinos, complementan esta casa.