Con el Málaga ya salvado, ¿ahora qué?

Las urgencias deportivas, sobre el campo, dieron una tregua a los actuales gestores del club, con el administrador judicial, José María Muñoz, al frente. Las cuentas del club pasaron a segundo plano, a la espera de cerrar una permanencia que al final costó más de lo previsto. Pero, pese a que falta un partido, el de mañana en Almería, la pelota regresa a los despachos, y de qué forma. La planificación general de la entidad, incluyendo la plantilla y la cantera, deberá concretarse de inmediato, ya que el tiempo apremiará mucho más a la entidad de Martiricos que al resto.

Con una reestructuración ya en marcha, con la reducción de ciertos gastos particulares de los Al-Thani y la puesta en marcha de un ERE, el siguiente paso tendrá una relación directa con la plantilla: deberá reducirse su coste de una forma importante. El tope salarial se colocará en unos cinco millones (irá variando), la mitad de lo que le permitían esta campaña y una tercera parte del gasto real en los futbolistas en el ejercicio que se cierra mañana.

Será imprescindible poner en marcha las negociaciones para la salida de jugadores, sobre todo de aquellos que tienen las fichas más altas, ya que la campaña que viene será imposible pagar esas cantidades. Y aquí comenzarán las dificultades. Algunos futbolistas querrán marcharse, ya que pueden disponer de un destino que les satisfaga, pero probablemente otros apuesten por cumplir sus contratos. Llega el momento clave, a partir del martes. En el éxito de estas negociaciones estará la viabilidad de la entidad, que mantiene un desfase que tiene que corregir.

Sigue sancionado

Cabe recordar que el Málaga está sancionado por LaLiga desde el pasado verano y no puede hacer fichajes, salvo los que lleguen por el salario mínimo de Segunda y con un límite total de dieciocho profesionales. De ahí que uno de los objetivos deba centrarse en levantar esa prohibición, algo muy complicado por la situación económica de la entidad. De ahí que, paralelamente a las conversaciones para reducir la plantilla a un tercio del coste actual, desde el club estudian otras medidas de ahorro y de ingresos.

La venta de jugadores se presenta como la gran alternativa para disponer de más dinero, pero las opciones son ahora más reducidas. Sin embargo, es probable que se hayan incorporado algunos nuevos valores a este selecto grupo de 'vendibles'. Y también se prevén otro tipo de medidas más estructurales, como una ampliación de capital, lo que permitiría, en el caso de que se pusiera en marcha, una gran inyección de dinero. Igual que la posibilidad de que aparezcan nuevos inversores y que puedan entrar en la entidad... Está todo abierto, pero la permanencia deportiva era el primer paso para que se pueda poner en marcha la otra salvación, la económica.