Los hosteleros, molestos por ser los últimos en recuperar la normalidad

Restaurantes, bares de copas y discotecas consideran que no avanzar en la desescalada supone un agravio comparativo con otras comunidades autónomas que ya tienen claro el calendario para la vuelta a la normalidad. Aunque aseguran alegrarse por la apertura del sector cultural, no esconden su malestar con la administración regional, que les ha vuelto a dejar «los últimos en la recuperación».

Especialmente preocupados se muestran en el sector de las discotecas y salas de fiesta, que acusa directamente a la Junta de engañarles. El vicepresidente del colectivo Andalucía de Noche, Juan Rambla, asegura estar «decepcionado», ya que ellos habían negociado con la administración que podrían recuperar la normalidad cuando se bajara de la tasa de incidencia de 100 casos por cada 100.000 habitantes. «Íbamos a recuperar las salas de fiesta y discotecas hasta las 5, pero sin avisarnos han roto el calendario y no han cumplido», se queja.

Confiesa que se enteraron del cambio de criterio por los medios de comunicación, y que tras pedir explicaciones sólo les han contestado que «es lo que hay» y que se volverá a intentar dentro de dos semanas. «Sentimos impotencia y frustración; pero sobre todo una profunda desconfianza hacia nuestros interlocutores». Tras este nuevo varapalo se pregunta qué más tiene que ocurrir para que el sector pueda recuperar la normalidad.

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Este empresario malagueño se muestra aún más extrañado al conocer que en otras comunidades autónomas como Madrid ya se ha fijado un calendario para la vuelta a la normalidad y también cuando se comprueba que ya se han recuperado otra serie de espectáculos de ocio, deportivos y de masas. «¿Acaso el virus es más peligroso en nuestro sector?», se cuestiona. «Nosotros también acogemos conciertos y música en directo, pero se ve que sólo somos cultura para pagar el 21 por ciento de IVA», añade.

Actualmente, las discotecas y salas de fiesta pueden abrir hasta las 3.30 horas, aunque con todo el público sentado en grupos de hasta ocho personas y un aforo máximo del 75 por ciento. Dichas limitaciones son idénticas a las de los bares de copas, por lo que Rambla se queja de que su gremio es el más perjudicado porque pierden las únicas horas que tenían en exclusiva. «Somos el sector que lleva más tiempo sufriendo y nadie repara en nosotros», señala.

Las nuevas medidas decretadas por el comité de expertos tampoco han sentado nada bien a los dueños de restaurantes. El presidente de la asociación Málaga Hostelería, Javier Frutos, dice tener una sensación agridulce, ya que la apertura del sector de la cultura supone un paso más para la vuelta a la normalidad. No obstante, lamenta que los cambios hacia su sector son mínimos (tan solo se iguala el número de comensales en mesas en el interior de establecimientos de ocio nocturno tanto en nivel 2 como en nivel 1, pasando de seis a ocho personas).

Frutos recuerda que hace dos semanas ellos también pidieron el fin de las restricciones, aunque la Junta de Andalucía no las haya autorizado de momento. «Creemos que la normalidad debe llegar cuanto antes porque más del 86% de la población ya está vacunada y seguimos bajando la incidencia acumulada». En su caso, cree que se trata tanto de una cuestión económica como mental. «Es necesario que empecemos a despegar y pensar en que la normalidad está llegando».

En el caso de la hostelería, los bares y restaurantes pueden abrir sus puertas hasta las 2, pero sólo dar servicio hasta una hora antes. En el interior de los locales se puede atender en barra y el aforo está limitado al 75 por ciento. A su juicio, las administraciones deben relajar las medidas cuanto antes para recuperar un horario y un aforo normal. Esto ayudará –añade– a que los turistas no terminen yéndose a otros destinos más aperturistas.